Estaciones de amor.

Otoño

Llegó el Otoño y con el, las clases en la secundaria.

El primer día, al parecer todo andaba bien en la vida de Matías y Sasha, ambos se amaban y su vínculo amoroso iba fortaleciéndose con el paso de los días, o eso es lo que aparentaba.

A pesar de su relación llena de intereses comunes, también estaba llena de diferencias, y por ende de discusiones que la mayoría lograban resolverse.

Pero como los árboles en el otoño, secan sus hojas y las dejan caer, así su relación se fue transformando.

Sasha tenía problemas familiares y Matías, durante el verano, estuvo con ella para consolarla y amarla, a pesar de que Sasha lo amaba ella no sabía como demostrarle su amor, y como todos sabemos nadie es experto en el romance.

La secundaria fue absorbiendo tiempo de ambos y solo compartían momentos juntos en los recreos de su jornada académica, era un tiempo muy corto pero ellos, lo disfrutaban al máximo sintiendo la presencia y la compañía del otro.

Al cumplirse un mes más de relación, Matías hizo un pedido a Sasha:

-Cariño, el viernes como tu sabes es un mes más a tu lado, entonces, deseaba saber si ¿Quisieras ir al cine conmigo?

-Me encantaría, pero debo consultarlo con mi madre.-respondió ella

-Esta bien, pero no te olvides.

-Mañana te digo si es posible.-dijo ella.

Matías se sentía un poco inseguro de esa situación pues, cada vez que Sasha consultaba con su madre, las cosas no iban tan bien.

Al dia siguiente la respuesta no fue muy agradable, haciendo una pausa a la conversación que tenían en ese momento, Matías se atrevió a preguntar:

-¿Qué dijo tu madre?¿Sí vamos al cine?

-No Matías, no puedo, mi madre se enteró sobre lo nuestro y me pidió que termine con esto, aunque yo no quiero, porque yo Te Amo.

Matías se quedó en silencio y no respondió por un momento.

-Entonces...¿Me vas a dejar?-dijo él.

-No lo haré, estaré contigo sin importar lo que mi hermano o mi madre me digan, eres mi todo Matías.

-Te Adoro Sasha, nadie va a lograr que lo nuestro se termine.

Así pasaron los días y las cosas parecían andar bien, pero solo fue una ilusión. Al cabo de una semana ambos tuvieron una discusión, que desató en sus vidas el inicio del fin.

-Sasha, dime ¿Tus notas de física están bien?.-Preguntó él con un tono de ternura, pero ella no lo tomó de esa manera

-Matías, tu no deberías preocuparte por ello, es mi vida y yo hago lo que quiera.- Respondió Sasha con un tono muy grosero.

-Ok, no era una pregunta para que la tomes de esa manera.-Dijo Matías con un tono serio al escuchar la respuesta de Sasha.

-Sabes, mejor me voy...-Sasha se levantó y no le dijo nada

Matías rápidamente la tomo del brazo.

-¡Suéltame!- Gritó Sasha, mientras ondeó su brazo agresivamente, mientras se soltaba de la mano de Matías y le daba la espalda

-Escúchame.-Dijo Matías mientras la tomaba del brazo de nuevo.

En ese instante algo muy impactante para su vida ocurrió, no vio venir el golpe que destrozó sus sentimientos, y toda la ilusión de continuar amándola se esfumaba en menos de un minuto. Sasha golpeó con su mano hecha puño a Matías en la cara, el entendió todo y la soltó mientras veía como se marchaba caminando. Al terminar el día, no cruzaron palabras y mucho menos miradas. Todo había llegado a su fin.

Unos días después Sasha envió un mensaje a Matías:

"Hola, se que estás molesto conmigo por lo que sucedió y créeme no fue mi intención hacerlo, solo fue una reacción estúpida, discúlpame por favor, no quiero que lo nuestro termine, perdóname te lo imploro, de verdad discúlpame. No quiero que este sea un adiós."

Matías no se atrevió a contestar en un momento, espero y contestó, pero ya no con la ternura que había contestado aquellos mensajes en los que Sasha pedía otra oportunidad.

"Sasha, sabes me cansé, me cansé de que solo ponga de mi parte para que esto funcione y a ti no te interese, me cansé de darte mis mejores palabras, mis horas y mis pensamientos solamente para que tu vengas y lo destruyas y después me pidas perdón, me cansé de que todo lo que hago no tenga un punto de recíprocidad, el amor se construye de dos partes y me cansé de que este amor se mantenga solamente porque a mi si me interesa de verdad. Quizá tu no desees que sea un adiós, a mi también me duele, pero más me dolió que la persona que más amo en este mundo, me responda de esa manera. Me bajaste de la nube donde te veía y donde me tenías, me quitaste toda ilusión y la botaste a la basura, es todo."

Sasha, muy triste leyó el mensaje y varias lágrimas brotaron y recorrieron su mejilla. Matías había escrito el mensaje con mucha tristeza aunque no quería decir esas palabras, sabía que eran necesarias, todos los errores se habían perdonado y sabía que su amor había comenzado a secarse con el transcurso de los días. El otoño se hacía presente en su romance, en su vida y en sus miradas. 

Días atrás, Matías había conocido una muchacha, ella comenzó a ir en el bus que lo llevaba del colegio a casa, el primer día que ella ingresó al bus, el le dirigió la palabra y ella le respondió con mucha ternura, con el paso de los días comenzaron a conversar y los mensajes de texto no se hicieron esperar. Pronto el otoño iba llegando a su fin y la primavera iba a ser parte de sus vidas.