Capítulo 4

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Abrí mis ojos lentamente notando mi extraña posición. Estaba sentada en el sillón, con mi cabeza descansando en el hombro de Yoon Gi, el cual tenía su barbilla apoyada en la parte superior de ella, acompañando el silencio con el ritmo constante de su suave respiración.

No tardé mucho en comprender que tras haber tomado varias tazas de café, solo pudimos aguantar hasta las tres de la mañana, tiempo más que suficiente pata sacarle información.

"Tiene 25 años, solo 5 más que yo."

Me aparté despacio intentando no despertarle y fui hasta mi habitación. Cojo una hoja y apunto los pocos datos que tengo sobre él para meterlo en un libro. Si hay algo de lo que no me fío es de mi memoria.

Me sobresalto al escuchar cómo se cierra la puerta de mi casa. Salgo a la sala y me percato de que Yoon Gi se ha ido.

Miro por la ventana con esperanzas de verlo sentado en la puerta, pero lo único que logro ver es el hielo que cayó el día anterior formando grandes charcos a causa de los enormes rayos de sol.
Me asomo más consiguiendo ver, por fin, su delgada figura caminar rumbo a la calle principal.
Salgo de mi casa y corro acortando los pasos que nos separan.

-¡Yoon Gi! -Grito. - Lo de ayer solo fue una broma. No me importa que te quedes en mi casa. -Digo captando su atención.
Se vira y de su boca suena la melodía de su risa.

-¿Ni un minuto y ya me echas de menos?

-En tus sueños idiota. -Respondo devolviéndole la sonrisa.

-Tranquila, la puerta de tu casa ya me pertenece. -Dice para retomar su camino, dejándome en mitad de la calle observando cómo su liso pelo negro desaparece.

(...)

-¡Taehyung!-Grito desesperada. - ¡Socorro!

-Isaac, deja de morder a Asia. -Dice Taehyung con autoridad quitándome el niño de encima.

Y es que desde que llegue me convertí en su nuevo juguete de morder.

-Lo siento Tae.

-Tranquila te acostumbrarás rápido. -Me da una de sus tantas sonrisas cuadradas.

-Tae, siento decirte esto pero, no se si sobreviviré para confirmártelo. -Digo provocándole una carcajada. -¿Les ponemos una película?

-Claro, haz los honores. -Señala el reproductor de DVD.

¿Quien diría que tras una película se quedarían fritos? Mientras, Taehyung y yo aprovechamos para ir recogiendo el desastre de hoy. Faltaba una hora para que los padres llegasen, el tiempo justo que emplean en dormir, por lo que no tendría que soportar sus llantos; y si eso ocurriese, Taehyung tendría que intervenir.
A veces me pregunto si se arrepentirá de haberme contratado, no es que tenga mucho tacto con los niños, pero al menos los entretengo.

-Oye Asia -Dice entre susurros.- ¿Conoces un tal Yoon Gi?

"¿¡ESPERA QUE?!"

-Si, lo conozco.

-¿Enserio? -Dice con gran entusiasmo. - Hace meses que no lo veo, tengo tantas cosas que hablar con él, ¿sabes dónde lo puedo encontrar?

-Si te digo la verdad ni yo misma se. -En realidad si , si se , en la puerta de mi casa por ejemplo.

-Qué pena. ¿De qué lo conoces?, porque realmente solo te pregunté por curiosidad, no esperaba que fuera algún conocido.

-Bueno... lo conocí en un parque. Estaba sola al igual que él y decidió hablarme. -Me golpeo la cabeza mentalmente,¿quién diablos se va a creer eso? ¿Yoon Gi estableciendo una conversación? Ja, ¡ni en Narnia!

-No me lo creo, ¿Yoon Gi?

-Si, solo me preguntó qué música estaba escuchando en aquel momento, nada de gran importancia.

-Eso tiene más sentido. - ríe.

Pues qué quieres que te diga, yo no le veo ni pies ni cabeza. Solo cuando quiere reírse de mi es cuando único inicia una conversación.

Seguimos hablando entre murmullos para no despertar a los niños, hasta que llegaron los padres a buscarlos. Alguno que otro tuvimos que despertar y la verdad es que entre tanto llanto me vi metiéndole a uno un pañal en la boca -No lo hice - lo que importa es que ya están en sus casitas molestando a sus papitos.

-¿Te importa si te acompaño hoy a casa?.

Asentí con energía pensando en que seguramente Yoon Gi estaría en la puerta de mi casa, y sabiendo que Taehyung quiere verlo serí una buena idea para por fin, quitármelo de encima.

Tae no paraba de hablar de su perro por todo el camino, mientras yo de vez en cuando comentaba algo sobre el que tenían mis padres, hasta que nos encontrábamos en la calle por la que vivo, forcé mi vista hasta visualizar la puerta de mi casa que, por desgracia, estaba vacía.

"Hoy Yoon Gi no está"

Me decepcioné un poco, esperaba ver al peli negro durmiendo con su cabeza apoyada en la puerta y sus carnosos labios entreabiertos dejando escapar su suave respiración, pero para mi mala suerte nada de eso pasaba.

-Gracias Tae, ¿quieres pasar?.

-La verdad es que tengo cosas que hacer, quizás otro día. Adiós. -Dice agitando la mano y retomando su camino.

Entro en mi casa y voy a lo de siempre, mi ordenador.
Y es que mi madre cada día me escribe algo, pero hoy no es el caso.

Sin nada que hacer, voy a mi cuarto y cojo un libro del cual se cae la pequeña hoja con los datos de Yoon Gi, la pongo entre las hojas finales del libro y empiezo leer.

Una hora, solo una hora bastó para que cerrara el libro y me dirigiera a la ventana. Me aseguré de que Yoon Gi aun no estaba, y es que, ¿para qué mentir?, no he podido estar tranquila pensando que a lo mejor le ha ocurrido algo. Y es que no es solo eso, ¿tendrá un lugar donde vivir? ¿Tendrá un trabajo?, y si es así, ¿por qué decidió vivir en la puerta de mi casa?


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Hi , personas zukulentas!
Adivinen quien esta harta de trabajos.
Si , yo vuestra zukulenta escritora 7w7.
Por lo que si se fijan suelo subir capitulo cada dos días , en este caso no se extrañen si tardo mas de una semana o por el estilo (que no creo que pase) pero en todo caso es culpa del instituto y de mi imaginación que no quiere dar de su parte :v .

Lives Crossed » Suga; BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora