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Después de aquello, ninguno se dispuso a hablar. El bello ambiente que se había logrado formar, se desvaneció en segundos, como si nunca hubo un buen momento en ese día tan de mierda para todos.

Apresurados, terminaron de desayunar, lavaron sus platos y salieron disparados en diferentes direcciones para poder recoger el reguero y así, irse a sus cuartos a pensar un poco.

NamJoon esperó el momento adecuado escondido a la vuelta de la esquina que daba a la habitación con Jin. RM ya lo tenía planeado, tenía que arreglar las cosas con el mayor de buena o mala gana. Esperó a que pasara, y justo cuando lo vio, le tapó la boca con su mano. En un movimiento veloz lo cargó en su hombro estilo "costal de papas" y se lo llevó a su habitación, sin importarle las miradas de los demás y los forcejeos del mayor por escapar.

Los menores les miraron algo raro, pero no les extrañaba pues ellos sabían -y era porque se notaba a kilómetros- que el capitán estaba loco por el hyung mayor.

Al llegar, dejó a SeokJin en la cama, y cerró la puerta con cerrojo para que no se tuviera que preocupar de la posible huida del mayor.

- ¿Qué piensas que estás haciendo NamJoon?- regañó con la mirada dirigiéndose a la puerta-

- ¿Tú qué piensas que estás intentando hacer, hyung?- dijo el rapero colocándose frente al vocalista, prohibiendo el paso-

El mayor frunció el ceño y se cruzó de brazos

- Muévete por favor, quiero salir- pidió amable para contener su molestia-

- No te pienso dejar salir- se acercó más a él para intimidarlo-

Mientras él avanzaba, el otro retrocedía a cada paso, hasta que por fin Nam hizo su jugada y lo acorraló contra la pared, sosteniendo sus muñecas con firmeza, mirándolo a los ojos con tristeza pero severamente.

- ¿Qué es lo que te pasa conmigo? -preguntó dolido- ¿Qué acaso ese beso de ayer no te hizo sentir nada?

- A duras penas recuerdo lo que pasó anoche Nammie... -agachó la cabeza para que no viera la respuesta en sus ojos-

NamJoon apretó un poco más el  agarre en las muñecas del mayor, inconforme con la respuesta, pero sobre todo debastado

- Sé que no me quieres... De la misma manera en que yo te quiero...- se le estaba formando un nudo en su garganta- >>El rechazo duele, NamJoon<<- se dijo así mismo en su mente, y después continuó- Pero te juro que si me das una oportunidad, no te arrepentirás Jin- le miró a los ojos de manera suplicante- quiero darte todo el amor que tengo- se podía percibir las lágrimas a punto de caer por sus ojos-

Esas palabras enternecieron el corazón del pelinegro, pero no era tan simple el poder olvidarse de YoonGi, siempre que escuchaba la palabra "amor" lo primero que se le venía a la mente era el rostro del rapero de tes blanca.

-Lo siento Jonnie... -levantó la mirada para verlo a los ojos- no puedo corresponderte- soltó al fin y soltando sus muñecas lo abrazó-

Okay, NamJoon juraba que lo intentó por las buenas.

Se zafó de los brazos del mayor bruscamente haciendo que se golpeara un poco contra la pared. Le miró con dolor en sus bellos iris, queriendo llorar, pero no, no se dejaría derrumbar frente a él.

-Por favor sal de la habitación- dijo serio y agachando la mirada-

-Nammie...- intentó calmarlo-

- ¡Qué te vayas ahora!... Por favor...-elevó el tono un momento, y después lo bajó para no causar preocupación en los otros miembros por si lo escuchaban-

Jin brincó levemente por el grito, pero acató las órdenes con una mirada muy triste en sus ojos.

-Lamento no poder ayudarte en esto- dijo parado en el marco de la puerta antes de salir- te juro yo no quería causarte dolor- sonrió triste, y por fin salió, dejando detrás de sí a un adolorido NamJoon-

Éste último dio un fuerte puñetazo a la pared, seguido de uno, tras otro, tras otro y así sucesivamente, hasta que se cansó. No le importó el olor a sangre que emanaba de sus nudillos, ni el dolor punzante en estos, su corazón herido era lo que más podía sentir en su dolido pecho. Tomó la camiseta que tenía puesta con fuerza y se mordió el interior de su boca, evitando soltar una sola lágrima, pero sin éxito ya que una gota rebelde bajó por su mejilla, dando paso a las demás para así terminar sollozando en silencio.

Nam estaba muy emamorado como para poder haber llorado por SeokJin, no era un amor de vagas palabras y conceptos, era un amor el cual las palabras no le cabían para poder alcanzar con plenitud todo lo que su corazón sentía, porque los simples conceptos que las personas pueden entender no sirven de nada si no los pueden sentir verdaderamente, y por esto mismo, porque sus sentimientos eran más reales que nada, era por lo que NamJoon lloraba, porque dolía que tan puros sentimientos no fueran correspondidos como él quería.

Detrás de cámaras Donde viven las historias. Descúbrelo ahora