— ¿Te comió la lengua el ratón? —no pude ocultar la sonrisa en mis labios. Sin duda era muy fácil de leer.—
— Que gran imaginación tienes, niña. —negación, iría por ese camino.
Lleve mi mano detrás de su nuca y lo acerque a mi, podía sentir su irregular respiración chocando con mi rostro. Tenía que admitir que mientras duraran los efectos de la cannabis me sentía capaz de todo, y ahora mismo esos efectos estaban desapareciendo, lo que causaba que mi osadía comenzara a controlarse, el cuerpo de Harry se sacudió levemente cuando comencé a entregar caricias a su nuca y me acercaba cada vez más a sus labios, en su rostro se podía distinguir claramente la decisión. Eche mi cabeza hacia atrás soltando la carcajada que tenía atorada en el fondo de mi garganta desde ya hace un rato y Harry pareció perdido un momento, lo que causó que riera aún más fuerte, Dios, que estupendo era incomodarlo. Mi risa cesó al tiempo que sus manos se posaron en mi cintura y con un ágil movimiento de su parte me sentará en el lavado, quedando a la misma altura de el, porque como era de esperarse, su altura sobrepasaba la mía por una gran diferencia.
— ¿Cómo reaccionarías si te dijera que es verdad? Que Louis y yo estamos en una relación. —el humor abandonó todo mi sistema y eso me cayó como un balde frío, esta vez fue su turno de intimidarme con su penetrante mirada esmeralda, me quede en silencio un momento admirando el color de sus ojos. Las fans no mentían, eran profundos e intimidantes— ¿Qué pasó con esa inquieta lengua tuya? ¿Se la comieron los ratones? —comenzó a acortar la distancia y una de sus manos se movió a mi espalda, subiéndola tan lentamente que me provocó que mi piel reaccionara ante su tacto. Si el quería jugar, yo jugaría.
Lleve mis manos al borde de su traje y lo atraje hacia mi nuevamente, ambos nos enviamos una sonrisa seductora, esto sería divertido, sin duda.
— No me sorprendería, pero sabría que estás mintiendo. Si tú correspondieras sus sentimientos tu atención también hubiera estado centrada en el, ¿no lo crees? —lleve mis labios a su oído y procure usar la voz más suavemente seductora que pudieran pronunciar mis labios— ni mucho menos me tendrías en esta posición.
— Te equivocas, muñeca. —me tensé cuando una de sus manos tomó un puñado de mi cabello y lo jalo suavemente hacia atrás, procurando que nuestras miradas colisionaran nuevamente en lo que iba de la noche.
El timbre de mi celular nos sobresaltó a ambos, ocasionando que la burbuja de tensión sexual que habíamos creado al rededor de nosotros reventara, Harry se alejó de mi y pude respirar mucho mejor, tomé el celular que se encontraba al fondo de mi bolso para atender la llamada antes de que esta terminara y contesté. Muy inoportuna, grillito.
— ¿Qué sucede?
— Creo que deberíamos irnos a casa, Gemma quiere bailar sobre la mesa y Dean solo la anima a hacerlo. —Mierda.
— Voy enseguida, no permitas que ponga un pie en esa mesa. —Corte la llamada y de un pequeño salto me baje del lavado, pase a un lado de Harry, que había estado esperando una respuesta por mi parte, pero que no le daría.
Pase por su lado y sentí su mano impactar con su mi trasero, un gemido escapó de mis labios y voltee en su dirección.
— No vuelvas a ignorarme, Charlie. —y eso fue lo que bastó para que mi lado descarado e imprudente surgieran inmediatamente. Lo tomé de la camisa y pegue mi pequeño cuerpo a su fornido pecho, mis manos bajaron por su abdomen —que se marcaba perfectamente a través de la camisa— hasta el bulto que comenzaba a formarse en medio de sus piernas, puse mi mano sobre este y le di un suave apretón, un gemido abandonó su garganta. Eso ánimo mucho más hasta que mis labios fueron directamente a parar en la piel desnuda de su pecho, para empezar a repetir besos por esta hasta subir a su cuello.
— Odio que me den órdenes, así que puedes esperar sentado a que algún día te obedezca. —murmure lentamente sobre su rostro. Me alejé rápidamente cuando noté que había bajado totalmente su guardia por un momento y corrí hacia la puerta para quitar el seguro. La cerré a mis espaldas y solté el aire que había estado reteniendo en mis pulmones.
De un momento a otro la multitud de gente comenzó a gritar y aplaudir, no tenía que ser una genio para darme cuenta de que era gracias a Gemma. Me moví entre ellos hacia la mesa donde habíamos estado antes y no daba crédito para nada a la imagen que estaban apreciando mis ojos, Chloë estaba intentando bajar a gemma de la mesa pero esta simplemente no la obedecía, mientras que por otra parte Dean trataba de parar a Chloë, está última parecía estar perdiendo la paciencia y supe que era mi momento para intervenir, me subí a la mesa junto a Gemma y rezaba porque esta aguantará el peso de ambas.
— Gemma, tu madre me acaba de llamar, la gente te está subiendo a sus redes sociales y no está para nada contenta de que estés dando este espectáculo. —La sonrisa de Gemma fue desapareciendo lentamente para sustituirla por un rostro lleno de temor— Vamos, baja para que podamos ir a casa.
Gemma bajo con ayuda de Louis, que hasta ahora había aparecido junto a Harry, trate de disimular mi risa al ver como tenía ambas manos en su bolsillo intentando que el bulto en sus pantalones se hiciera menos notable.
Cogimos nuestras pertenencias y guardamos las botellas de alcohol que aún tenían su contenido dentro de nuestros bolsos, Chloë me tomó del brazo y comenzó a caminar junto a mi, que había entrelazado mi mano libre con la de Gemma. Al llegar al vehículo busque las llaves dentro de mi bolso y las tomé para desbloquear las puertas de este, grillito se despidió con un beso en el cachete de Harry y Louis, Gemma imito su acción pero escuché como le susurró a Harry un "si alguna vez te escucho hablar sobre lo de ahora juro que publicaré tu número de celular." Reí para mis adentros y esta vez fue mi turno para despedirme, besé la mejilla de Louis y cuando fue el turno de despedirme de Harry hice una pequeña reverencia. Atrape mi labio inferior entre mis dientes para evitar reír y arruinar la seriedad.
— Un gusto compartir con usted, majestad. —me di media vuelta y abrí la puerta del piloto— En casa no se coge, Dean, así que cuidadito. —espete al notar que Dean se encontraba sentado junto a Gemma.
Bueno, si, pero sería yo quien la bautizara.
[...]
— ¿Estás despierta, grillito?
— Sí, ¿qué ocurre?
— Creo que hice algo que no debía esta noche, —Chloë que se encontraba de espaldas hacia mi en la cama se volteó de inmediato, no dijo nada pero podía notar su mirada expectante en medio de la oscuridad, por lo que proseguí. Tarde en encontrar las palabras perfectas para que no me dejaran mal— toque al amigo de Harry.
Chloë entreabrió los labios asombrada
— Cuéntame todo con detalle, maldita devil spawn.
Y así fue cómo le narré de una manera breve lo ocurrido, sus ojos me miraban curiosos y de vez en cuando se expandían ante la sorpresa, definitivamente ella no se esperaba algo así. No era una mojigata y mucho menos era virgen, pero vamos, había estado a solas en un baño con Harry Styles y no precisamente hablando sobre nuestras vidas.
— Y fue cuando tu me llamaste. —Finalice la breve historia, sin censurar ningún mínimo detalle—
— Creo que no te mintió sobre el y Louis, —fruncí el ceño sin saber a que venía eso— Louis parecía molesto al notar que tu y Harry habían desaparecido, trate separar el hecho de que era Larry Shipper, pero cuando insinué en broma que quizás ustedes habían sucumbido ante la tensión sexual su semblante cambió radicalmente.
Mordí mi labio inferior nerviosa, en qué rayos estaba pensando.
N/A
Aproveche el pequeño ataque de inspiración que me nació para escribir 5 capítulos más —sin contar este—, que solo dependerán de sus votos y comentarios para publicarlos.🧡
ESTÁS LEYENDO
The Girl Who Broke Larry Stylinson. | h.s |
Roman d'amour"- Por favor no me dejes, Harry."