Con el corazón incrustado de cristales,
Que relucen cuál candelabros celestiales.
Redactando los más dolorosos versos,
Con lágrimas, recordando tus besos.
Y dime entonces, ¿cómo olvidar lo nuestro?
Tu recuerdo me persigue cual pasado siniestro.
Se hizo oscuro,
Apagaste el quinqué que iluminaba mi sendero.
Como deseo que este no fuese mi paradero.
A pesar de lo anteriormente mencionado,
Aún anhelo poder estar a tu lado.
Me haces daño y me agrada,
Cuál dolorosa, pero placentera daga.
Ahora dime;
¿Cómo afrontar el existir sin ti?
Concédeme pues, oh bella musa,
La posibilidad de derretirme, rosando tu blusa
Concédeme pues, un beso que torture mi alma,
Para poder estar en cama.
Y descansar definitivamente,
Amándote infinitamente.
FIN
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Veinticuatro poemas y memorias de un trastornado
PoesiaColección de poemas que plasman la diversidad de sentimientos y emociones que pueden presentarse en el transcurso del día a día de un adolescente y, ¿por qué no?, también en el diario vivir de un adulto. De antemano, les gradezco su atención y espe...