[36] Oh, Billy. . .

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Una noche Matthew recibió una llamada anónima que atendió por que podría ser una emergencia o, Frank llamando desde algún sitio de Hell's Kitchen.

No se imaginó que oiría un sermón sobre una supuesta infidelidad, rió negando varías ocasiones y colgó restándole importancia.

Al otro día por la mañana cuando Castle ingresó a la casa, cubierto por algunas heridas nuevas, arrastrando las botas; le comentó lo sucedido horas atrás, claro, Murdock solamente sonreía con gracia al escuchar las amenazas de muerte y torturas para quién dijo tales cosas.

Frank desayunó para salir en busca del desgraciado, pues Matt sedió: "-Dijo algo de Russo... no lo escuché antes".

Fratt: Headcanons.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora