Cαpítulo 3

111 5 2
                                    

Sigue narrando _____

Me paré delante de la puerta y piqué un par de veces. El ruloso me abrió con solo unos bóxers. Joder, joder, joder que bueno estaba.

– Hola preciosa.- Dijo con una sonrisa pícara ante mi cara de sorpresa.

– H-Hola...-Dije como pude.

– Empezamos a hacer el..Trabajo?- Contestó claramente con otras intenciones.

– Contigo así, no. - Dije entrando en su piso.- Primero vístete por favor. Segundo ves sacando los libros y libretas para empezar, porque yo aquí no veo un ambiente de estudio.-Dije terminando mi frase.

Dicho esto, el chico entró en lo que supuse que era su habitación, y salió ya vestido. Estaba sorprendida de que me hubiera hecho caso.

– Muy bien. Y... Dónde nos pondremos ha trabajar?- Dije de golpe.

– En mi habitación.

– No creo que sea buena idea...

– Que sí, además ahí lo tengo todo.

Me guió hasta ella y nos sentamos en un escritorio, que a saber para que usaba él un escritorio, porque para estudiar seguro que no. Sacamos los libros y yo empecé a hablar sobre como haríamos el trabajo y la información que teníamos. El no me hacía ni puñetero caso, así de claro.

– Harry, ¿Me estás escuchando? Vas a trabajar o te vas a dedicar a hacer el vago?

– A trabajar, a trabajar.

– ¿Sí? ¿Cuándo? ¿Cuándo los cerdos vuelen?

– Dios, sería una cosa muy extraña que los cerdos volasen... Pero no. Trabajaré con una condición...

Suspiré y pregunté ''con qué'' condición.

– Hmmm con que me des un beso.

– Ni hablar. Sabes que no te lo daré, ¡centrate en el trabajo anda!

– Qué pena con las ganas que tenía de trabajar...- Dijo irónicamente.

Estuvimos discutiendo eso durando bastante tiempo. Yo tenía claro que no le iba a dar un beso. No soy ese tipo de chicas, quizás a otras le hacía eso y caían a sus pies, pero yo no. Y además sabiendo como es él, no sería solo un beso...

Se pasó la tarde refunfuñando y insinuándome, pero yo pasaba de él. Miré el reloj, las 20:02. Ya era hora de irme, y no habíamos terminando el trabajo.

– Harry debo irme, es muy tarde. Mañana vienes tú a mi apartamento y lo acabamos de una vez por todas.- Dije.

– Voy donde tú quieras.

Suspiré.

--Adiós Harry, y mañana acuérdate de traer los...- Me interrumpió dándome un...beso? Eso parecía la típica novela de amor. Dios no no no no quiero, pero para que engañarnos, sabía jodidamente bien ese beso. Cuando se separó por falta de aire, me dijo:

– Hasta mañana, guapa.- Cerrando la puerta para que no pudiera decir nada más. Oh dios no sabía que hacer, pero quería más. Una parte de mí me decía que picase y le devorase con mi boca, pero otra parte me decía ''Estás loca? Como has podido permitir que ese te besase?''.

Mientras iba camino a mi apartamento pensando en lo sucedido hacía apenas unos minutos, un chico moreno y alto, bastante guapo a poder decir, se cruzó por delante y como iba distraída le tiré la bolsa que llevaba.

– ¡Oh! Perdón enserio es que estaba distraída lo siento de veras.- Dije agachándome para ayudarle a recogerlo todo.

– No te preocupes, si supieras la de veces que me ha pasado- Dijo divertido.- Oye, ¿tú eres de aquí? Nunca te había visto.

– Eh si, bueno vine hace una semana mas o menos para estudiar en la universidad.- Dije nerviosa.

Me sonrió y asintió.

– Bueno...- Dijo esperando a que acabase yo su frase.

--_____, _____ Willson.

– _____ , encantado, soy Zayn. Me voy que si no mi compañero de piso me cierra la puerta.- Dijo riendo.

Reí y asentí algo nerviosa pero a a vez tranquila. Este chico me transmitía buen rollo, pero a la vez nerviosismo.

– Adiós.- Dije tímida.

Llegué a mi apartamento y entré en casa para encontrar a Mady hablando concentrada por el móvil.

– ¡Hola _____ ! ¿Qué tal con míster Styles?-Dijo pícara.

– Puf si te contara...Ahora vengo, voy a ponerme el pijama.-Dije. Siempre cuando llegaba a casa me lo ponía. Me sentía más cómoda

– Vale, pero en cuanto vengas me lo cuentas TODO- Resaltando el ''todo''..

Me puse el pijama que consistía en una pantalón corto, ya que en ese tiempo hacía calor, y una camisa de tirantes de esas de toda la vida vamos.

– Oye _____, ahora que lo pienso, ¿y tu mochila?- Me dijo Mady

– ¡Mierda! ¡Mi mochila!- Dije gritando. Ahí dentro tenía, ademas del libro y el estuche, mi móvil ya que lo metí antes de entrar en su piso.

Salí corriendo de ahí. Me daba igual que fuera descalza y en pijama, necesitaba mi mochila ya.

Revenge or love? [Harry Styles]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora