Blind emotion ♡ KaiHo [MWM]

Necesidad

En el último piso del edificio más alto de la zona, una figura masculina permanecía al filo del concreto. Su expresión serena era incongruente para alguien que yace a centímetros de una muerte inminente, pero cuando eres un ser superior, la mortandad no es algo que te asuste mucho.

Un suspiro fastidiado salió de sus carnosos labios, mientras que su diestra acomodaba su cabello sin ser precisamente delicado. Había arreglado el gran error de llevarse un alma equivocada, y ahora los dos Song HyunChul estaban en los lugares correspondientes, sin embargo, la esencia humana es mucho más complicada que un un simple "vivo" o "muerto", pues los destinos de las personas afectadas estaban cambiando drásticamente, y era su responsabilidad velar para que ninguno encontrará un mal final, prácticamente tenía que ser el ángel guardián de dos familias. Podría escucharse como un trabajo fácil, y en teoría lo era, claro, si se ignoran los hechos de que su labor como mensajero se ve obstruida y que está viendo de primera mano todo el sufrimiento que su error causó... La culpa le estaba calcinado, lo podía sentir en cada maldita jaqueca.

Como anhelaba poder sentir un poco de paz, unos minutos de calma tal y como lo había sentido con ese chico del parque... Ese lindo chico.
Desde su encuentro inesperado, no había podido dejar de pensar en él, no sólo por el increíble poder que poseía, también por esa belleza que no tenía comparativa.

-- Debí haber preguntado tu nombre... -- Le habló a la nada, perdiéndose en el espectáculo de luces que poco a poco iba apareciendo delante de sí.

✨❤✨

No estaba seguro de cuantos días habían transcurrido luego de haberse topado con ese peculiar extraño. Aún no podía dejar de pensar en la manera en que llegó, la cual fue como si sólo se hubiese materializado a su lado, ni mucho menos de cómo es que se fue, pues no hizo ningún movimiento en la banca al levantarse, y ni que decir de su aroma, una perfecta combinación entre el jengibre, la salvia y gardenia, en definitiva le hacía suspirar cada vez que su memoria recreaba la sensación.

-- De nuevo pusiste cara de idiota. -- Alertó BaekHyun entre un montón de carcajadas. -- ¿Qué pasa, amigo? Llevas varios días ido.

-- No es nada de que preocuparse, sólo han sido sucesos... raros. -- Fue el único adjetivo que pudo emplear.

-- No sé sí tu seas el más indicado para hablar de cosas raras. -- Bromeó, alborotado el cabello de su mayor. -- Sea lo que sea, no le des muchas vueltas, tú mismo lo has dicho: A veces, hay cosas que no tienen explicación.

Pese que JunMyeon no podía verlo, sabía perfectamente que el menor le dedicaba tales palabras con aquella tierna sonrisa que asemejaba un rectángulo... Esa sonrisa que no veía en años.

-- Ya voy de salida, ¿Estás seguro que podrás cerrar tú sólo?

-- Yo sí, pero KyungSoo, no. Le pidió a ChanYeol que pasará por mi.

-- ¿Al que tiene en la zona del amigo desde el primer año de facultad? -- El rubio de bonitas facciones, enarcó una ceja con incredulidad.

-- El mismo.

-- ¡Dios! ¿Hasta cuándo se va a cansar de ser el mandadero de Do?

El azabache no pudo evitar reír, al tiempo que encogía sus hombros. -- Parece ser feliz así, además, le está funcionando, Soo ha salido en varias citas con él, quizá en una próxima al fin le diga que sí.