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No entendía.
Estaba demasiado confundido. Si se suponía que Jungkook estaba muerto, ¿cómo podía verlo?
Quizás se había vuelto loco, o quizás...
Se alejó de la ventana y tomó la cámara que había dejado cargando dos días enteros. Revisó las fotos, buscó y buscó...
El timbre sonó. Era Hoseok.
ㅡHola Tae, terminé de estudiar y me aburrí así que, aquí estoy ㅡpasó el umbral de la puerta y tomó asiento en el sofá más grandeㅡ ¿Qué hacías? ㅡTaehyung le explicó todo mostrándole la cámaraㅡ Cierto, había una foto que me ibas a mostrar.
El rubio movió las teclas de la cámara tan rápido como pudo hasta encontrar la foto de Jungkook. Cuando lo logró, sus ojos brillaron. Le mostró la foto a Hoseok y éste puso una expresión rara.
ㅡ¿Las flores del jardín? Creí que hablabas de una persona.
Taehyung lo miró raro y volvió a revisar la foto.
Jungkook no estaba.
Esa noche le costó mucho conciliar el sueño pues se la pasó llorando.
A las cuatro de la mañana pudo cerrar los ojos con un rastro de lágrimas en la cara. Se había dormido con la esperanza de que Jungkook lo despertara con una caricia en su mejilla y poder descansar tranquilamente, pero eso no pasó.
Al siguiente día despertó sin observar a su alrededor, sólo fue directo al baño para ducharse. Se miró frente al espejo mientras se lavaba los dientes y sin previo aviso alguien abrió la puerta: ¡Era JungKook!
Se quedó pasmado mirándolo a través del espejo hasta que JungKook le dijo que le notaba raro. Taehyung se enjuagó la boca y aún no podía creer que lo estaba viendo. Se veía tan real.
ㅡ¿Por qué no hablas? ㅡpreguntó el menor y se quedó observándolo un momentoㅡ No me digas que otra vez tuviste uno de tus sueños raros.
Taehyung se quedó meditándolo.
Ahora entendía.
ㅡ¡Oops! ㅡsoltó mostrando su sonrisa cuadrada.
ㅡAigoo, dos años de casados y tú sigues soñando cosas raras, y lo peor es que siempre terminas confundiendo la realidad con tus sueños ㅡsonríoㅡ Iré a preparar el desayuno ㅡse fue dándole una pequeña nalgada.
Tae suspiró haciendo un puchero.
ㅡTe juro que se sintió muy real ㅡapagó la luz y salió detrás de su esposo.
