Los gemelos Migraine

Dos

Aáron

Teníamos sueños recurrentes de lo que había sucedido, sin embargo no le dijimos a nuestro padre, el y mamá estaban separados desde que nacimos, especulo y mi hermano asegura que fue nuestro nacimiento el que nos separó.
Yo iba a la cocina por algo de beber cuando escuché a mi papá hablando con alguien
—se están portando muy extraño y de vez en cuando se levantan a media noche —se escuchaba una voz femenina al teléfono —si, están dormidos cuando pasa y Zenón habla en quien sabe que dialecto en las noches —me quedé escuchando, esa vez al teléfono me era familiar y mi padre estaba dando la espalda —¿no crees que ya esta pasando? —Zenón bajo y le hice señas para que se callara —yo se que a su edad lea pasan muchas cosas pero en ninguna clase de biología enseñar que te levantes a las tres de la mañana a hablar en algún idioma demoníaco, entiendo que no sepas de los humanos pero...
No entendíamos nada, estábamos nerviosos, tal vez era alguna novia de papá, pero jamás llevó una ni menciono vagamente nada, pero ¿como que no entiende de humanos? Nos escondimos por si algo llegaba a pasar
—si, cariño —volteó hacia los lados —estoy solo, están dormidos...no se darán cuentan, ven, solo unas horas...si, te espero
Miramos la puerta esperando a que llegara pero en cambio sentimos un calor muy intenso
—te tardaste —¿a quien le dijo?
—me puse a investigar y me di cuenta de que no cuidas bien a mis hijos —¿por donde llegó?, nos asomamos y vimos una mujer que apenas cabía en la casa, tenía unas alas enormes y parecían estar quemadas, sus rodillas miraban al lado incorrecto al igual que sus codos, entramos en pánico —estuvieron jugando a la ouija y molestaron a los demonios, eso no debía pasar hasta dentro de cuatro o cinco años mas, irreaponsable —comenzaba a tomar forma humana, sonaba como si rompieran miles de huesos
—jamás me gusto el sonido de eso —se acercó a él y le dijo algo al oído entonces papá se levanto y nosotros corrimos a nuestro cuarto pero al inicio del pasillo había alguien parado mirándonos fijamente por lo que nos asustamos y caímos por el primer tramo de las escaleras —no hagas eso, los asustas
—creí que le gustaba a la gente, hay miles de películas que hacen eso —bajó transformada en una mujer realmente linda —no sabía, ¿están bien?
Estábamos tan confundidos que no nos salían palabras
—ya no queda de otra, explícales —mi padre la miró
—les explicaremos los dos, no renuncie a mi puesto en la línea del trono para que me salgas con que lo haga sola
N

os dijeron que mi madre era heredera al trono del infierno o algo así pero se fue con mi papá y como nacimos pues ya no puede ser Lucifer, es todo muy romántico supuestamente. Yo estaba pensando: ¿eso nos hace como...príncipes del infierno?...¿semidioses?, ¿lacras?, ¿algo?
—pues vamos al infierno —y mi madre nos miró a secas —pero necesito que consigan cosas
—espera, entonces te acabamos de conocer, nos explicas tu supuesta historia de amor, dices que eres un demonio ¿y nos vas a llevar al infierno?, ¿así nada mas? —dije incrédulo
—¿entonces, nos vas a matar o sacrificar? —dijo mi hermano, que ahora que lo pienso tiene razón
—no, ustedes ya están muertos, aunque les corte la cabeza van a dejar de existir, solo consigan cinco almas humanas, las de demonio valen por dos, las meten en los frascos de sus habitaciones y luego buscan sangre de...
—¿de virgen? —Zenón se esperaba que dijera eso
—no, ¿porque sangre pura?, necesito dos frascos de sangre de prostituta y uno de cabra
—espera pero nosotros no tememos frascos para alma ni nada parecido —repliqué
—ya están en tu cuarto, Aáron, escucha lo que te digo, presta atención por favor —estoy confundido —una vez que tengan todo lo dejan caer al mismo tiempo a que se rompa y tendrán su portal listo, yo los espero
—¿y como vamos a hacer eso?, es decir, todos nos conocen, tendríamos que ir a otro estado para que no los reconocieran y además, nos van a matar primero —¿porque Zenón tiene tanta razón?
—esta parte me encanta, miren, les voy a entregar sus armas, no se asusten cuando suceda lo que tenga que pasar
Abrió dos portales pequeños, sacó una Oz o como se llame y un arco y flecha...a mi me dio las flechas y a Zenón la Oz, se nos quedo mirando y luego Zenón comenzó a gritar
—no la sueltes hasta que termine, no te asustes, es reversible, calma —mi ladre se reía.
Luego sentí dolor en la cabeza y que mis rodillas se volteaban, mi madre según riendo, vi a Zenón y sus ojos se habían caído hasta su estómago y le empezaban a salir mas, una coca se formaba en su vientre y le crecían colmillos...una fuerza fantasma le esta cociendo la boca...
—ya casi está listo, no falta mucho pequeños —no sabia que hacer, mi madre nos estaba mutilado vivos —ya está, comiencen la cacería
Y se fué...