Freaks, la historia de "Los Fílicos"

Capítulo 3: Lo que esconden "Los Fílicos"

Rousse se mira al espejo del cuarto de baño, se acomoda su pelo negro ondulado y va hacia la ducha  y acciona el agua caliente, y comienza a desvestirse, no se da cuenta de que está siendo observada por un pequeño agujero de la puerta y cuando termina de desvestirse se mete en la ducha, cierra la mampara de la ducha y tararea canciones al azar, haciendo un pequeño remix. Mientras está distraída, el que la vigila entra al baño de forma sigilosa, mira la ropa de Rousse y se agacha, la acaricia suavemente y comienza a olerla buscando placer, pero no es suficiente. Va hacia la ducha, abre la mampara y pone a Rousse contra la pared de forma violenta. Intenta sujetarla para que no se vaya, le pone las manos en los pechos mientras sigue oliendo a Rousse, y de vez en cuando le da un lametón.

Sé que te gusta -Dice Steven mientras aguanta a Rousse

Rousse intenta zafarse más de una vez, pero es inútil, está inmóvil y solo puede jadear y gritar.

¡Suéltame! -Susurra para que solo lo escuche Steven. Apoya sus manos en la pared para no caerse de forma directa en esta.

Steven deja una de las manos para empezar a tocar a Rousse, disfruta viéndola jadear, y decide seguir con el juego, así que su mano libre va hacia la vagina de Rousse y comienza a masturbarla, él también disfruta y se deja llevar por su placer, quiere cumplir con el trato al que han llegado todos "Los Fílicos", acabar con Rousse.

No te hagas la dura... "Los Fílicos" follamos entre nosotros, pero resulta que yo solo soy adicto al sexo...

Steven continúa tocando a Rousse, la chica también sigue gimoteando, pero no de placer, sino de dolor, quiere huir del baño, pero no sabe como, así que acaba rindiéndose y dejándose llevar por la situación

Deja de tocarme -Dice mientras sigue intentando zafarse de Steven,quien deja un momento a Rousse libre para quitarse la camisa, pero a la chica no le da tiempo a escaparse, ya que cuando da un pequeño paso, Steven vuelve a ponerla de nuevo contra la pared.- Quiero irme... -Rousse se entrega al dolor de la situación y empieza a arrepentirse de haber aceptado el trabajo. Quiere escapar de esa situación, huir y dejarlo todo atrás, dejar que encierren a esas personas, pero sabía que dentro de esas mentes perturbadas, había personas con problemas de la infancia.

Disfruta -Steven comenzó a penetrar a Rousse. Esta gemía, pero nadie le echaba cuenta, todos hacían oídos sordos. Todos la escuchaban, pero decidieron quedarse en sus habitaciones y seguir con aquel plan, el cual era destruir a una persona inocente.

Al acabar varios minutos después, Rousse se quedó bastante tiempo pensativa, se sentó en la ducha pensando y dando vueltas a lo que acababa de ocurrir, no se lo podía creer, acababa de ser violada por uno de "sus pacientes".

Steven salió de la ducha y comenzó a secarse un poco para poder vestirse, se quedó un buen rato sonriente, y se dirigió a Rousse en un tono sarcástico.

Me encantan las gatitas como tú.

Rousse estaba en su mundo, necesitaba bastante tiempo para asimilar lo ocurrido, pero algo en su cabeza la despertó e hizo que volviera al mundo real, miró desde abajo a Steven con rabia.

¡Vete a la puta mierda, violador!

Steven comienza a reírse y luego mira a Rousse con algo de desprecio y con un tono amenazante.

Si algo sale de aquí,  de lo que tú y yo hemos hecho... todos irán a por ti... -Rousse lo mira cabreado. Steven continúa ordenando su ropa y de vez en cuando le echa una miradita a Rousse- No me mires así, es verdad. Nadie te salvará. Ni siquiera Edward. Métete algo en la cabeza, serás el juguete sexual de toda esta casa, nadie te rescatará, no tendrán piedad de ti, y tú serás una "fílica" de las de verdad.