Mayo 12

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Querida Valeria:

De vez en vez, contemplaba la única fotografía que conservo de ti.

Eres más hermosa de lo que pensaba, tus intentos por expresar la manera en la que te sientes son más lindos de lo que crees, tu cabello corto; me encantó. Tu sonrisa me enamoró.
El único problema que tenías era yo.

Sí, yo.

Sé lo mucho que te esforzaste para que las cosas no terminaran de esta manera, ¿Y por qué no decirlo? También yo intenté resistirme apenas me di cuenta en lo que me estaba metiendo.

Pero, ¿Qué se le va a hacer al amor?

Mis intentos por perseverar fueron aún más insistentes. No me rendí.
¿Debería considerarme valiente o un necio?

Conservo un par de escritos en los que prometías que el invierno de tus sentimientos terminaría. No lo hizo, pero, ¿Qué más da?
Aún no es tarde para darse cuenta de que suma una razón más por las que me he enamorado de ti.

Hemos sido un par de tontos intentando modificarlo.

No hay nada qué modificar en ti, mujer. Si detesto verte quejándote una y otra vez de ti misma, renegando de tu estatura y no sabiendo qué hacer con tu forma de ser tan insípida y estricta.

¿A caso no sabes, mujer, lo mucho que me gusta tu inusual altura? Lo que me encanta tu natural belleza, tu desinterés por crearte una máscara artificial con todas esas pinturas fabricadas de petróleo y sabe Dios cuántas cosas más.

Querida, de personas falsas el mundo está cansado.

¿A caso no lo sabes, o es que no lo quieres saber?
Que tú eres auténtica.

Que me gusta la cicatriz en tu frente, tu débil y delicada complexión, tus delgadas manos, tu inexperiencia en el amor, la forma en que logras motivarme para convertirme en la mejor versión de mí, pero sobre todo, aquella molestia que en ti provoca cuando te llamo de una manera dulce 'mi amor'.

Lo que es hermoso de ti, va mucho más allá de tu cuerpo.

Es tu corazón y tu alma.

Tu sentido del humor.

Tu mente.

¿No lo sabes?
De tus inseguridades será lo último que recuerdes conmigo.
Voy a hacer que te ames tanto que terminarás irremediablemente enamorada de todos y cada uno de tus defectos, sólo así serás capaz de comprender la forma en que yo te miro.

-Paul.

Cartas Para ValerieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora