extra escolar ; warmi

07.

mimi's pov

estuvimos sentadas en silencio unos cuantos minutos y me empecé a poner nerviosa.

"tal vez deberíamos volver abajo y continuar con matemáticas." dije, intentando pensar que no había pasado nada.

"sí" se levantó y me siguió.

fuimos abajo y nos volvimos a sentar en el sofá. ana continuó estudiando para el examen de álgebra. mientras, yo estaba sentada y mirándola como una idiota. parece estúpido pero realmente nunca me había dado cuenta de lo bonita que era hasta ahora. se había cambiado y se había puesto una sudadera vieja y unos leggins, también se había quitado el poco maquillaje que llevaba y se había puesto sus gafas para poder leer bien los problemas. cada vez que me pillaba mirándola yo intentaba disimular mirando el libro. soy demasiado obvia.

"pareces tan diferente ahora." dije susurrando.

"qué dices?" pregunta curiosa.

"no sé es que en el instituto siempre llevas ropa negra y así, también parece que estás siempre enfadada. pero sé que en el fondo eres muy amable y eres todo lo contrario de lo que intentas aparentar." le dije, mirándola. "eso es todo lo que es, no? tu manera de actuar." le pregunté.

"sí que lo es pero no puedo remediarlo." dijo, bajando la mirada.

"jo, bebé." dije y me acerqué para abrazarla.

pude notar que ana estaba un poco sorprendida por la manera en la que actué. yo también lo estaba la verdad, qué me está pasando.

"te gusta alguien?" le pregunté, saliendo del abrazo.

"no."

"ah." dije, un poco, decepcionada?

"es viernes por la noche y estáis las dos estudiando, salid, haced algo, sois jóvenes aún." dijo la madre de ana, que salió de repente de cualquier sitio, ni siquiera sabía que estaba en casa.

"mamá, me estaba preguntando que si mimi podría quedarse a dormir? si quieres claro." dijo ana mirándome.

"claro, si te parece bien." dije mirando a la madre de ana, me causaba respeto.

después de hablar con mi madre para informarle de lo que iba a hacer esta noche, subí a la habitación de ana.

"puedes dormir en el otro lado de la cama, la verdad es que siempre duermo en la parte derecha así que tampoco me importa." dijo ella, parecía nerviosa.

"si estás nerviosa no hace falta que me quede a dormir." dije, no quería que estuviese incómoda.

"no, no estoy nerviosa por que te quedes a dormir."

"perfecto." me senté en el borde de su cama.

ana y yo estuvimos hablando durante un buen rato. se abrió conmigo y eso me gustó. sentí que cada vez nos hacíamos más cercanas.

"no te pasa que a veces piensas en el universo y te das cuenta de que somos diminutos comparados con él y que no somos absolutamente nada?" dijo ella.

me di cuenta de que le gustaba hablar de este tema porque cada vez estaba más contenta.

"pero hay veces en las que pienso que estoy sola en este universo." dijo ella con la mirada triste.

"no estás nunca sola, te lo aseguro." le dije.

"lo sé, pero hay veces que tengo esa sensación, como que nadie consigue entenderme, no me gusta."

"creo que es porque la gente no se toma la molestia en conocerte de verdad, o porque directamente tú no les dejas." me reí un poco.

"sí, la verdad es que opto más por lo segundo." se rió conmigo y a día de hoy puedo afirmar que su risa es lo mejor que he escuchado.

"pues que sepas que puedes decirme y contarme lo que sea porque estaré para escucharte siempre que quieras." sonreí.

"de verdad lo dices?" me miró un poco recelosa.

"por supuesto."