Esta historia de cuentos de hadas y mágicos momentos no podía ser para nadie más que para mi persona favorita en el mundo y el universo, aquel príncipe que llego a rescatarme de la soledad en la que me encontraba. Antes de conocerlo creía que las princesas no tenían que esperar a ser rescatadas, sino que debían rescatarse solas, aun lo creo pero de diferente manera, porque cuando el llego, lo primero que me enseño fue que ser rescatadas podría ser la mejor experiencia y sensación de cualquier experiencia y sensación y por eso creo que esta historia va dedicada para aquella que no solo llego a rescatarme sino que llego para ayudarme a escribir la mejor historia nunca antes mejor contada , como le decíamos antes él y yo.
Hoy él tiene su vida y yo la mía, pero siempre va a conservar el mejor lugar en mi corazón, después de DIOS, creo que fue la más grande bendición haberlo conocido y haber tenido más de una oportunidad de ser amada por ese ser tan lindo de luz y de amarlo quizás no de la mejor manera, pero amarlo como nunca antes había amado a alguien en mi vida.
Mi niño alto, mi compañero, mi mejor amigo, mi pareja y cómplice no será lo que vos me diste, pero creo que no había mejor manera que esta para que recordemos lo que vivimos, sufrimos, lloramos y reímos juntos en su momento para conservarlo a través del tiempo. Por eso decido dedicarte y regalarte esta huella que juntos dejamos marcada en el cuento del escritor de allá arriba, Leonel gracias por cada momento vivido y cada instante de amor puro y genuino, y no te olvides, que los momentos más lindos fueron escritos a tu lado, esto fue posible gracias a vos, y ahora que no estamos juntos, recuerda que ahora sé que realmente pasa el tiempo y tengo la simple necesidad de vos, mi alto...
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Viviendo con la necesidad de vos
Novela JuvenilMe gustaría decirles, que esta es la historia de amor que todos soñamos tener alguna vez, de esas que duran para siempre, y de esas que te sacan sonrisas sinceras. Lo fue, por lo menos al principio, pero el final, rompió mi corazón, fui feliz pero m...