La Caza Recompensas

Farewall

Así fue... rompí mi promesa... volví a trabajar y el doble de tiempo como mercenaria, tenía tan solo 17 cuando comencé con trabajos que realmente eran serios, me volví de las mejores, pero no me enorgullecía de eso... lo odiaba... cada día soñé con el momento en que Jackie se curara para dejar este trabajo, pero realmente no sabía hacer nada mejor, era la forma más fácil de ganar dinero y la más rápida.

Parecía ya haberme acostumbrado a esto, parecía que cada vez los trabajos eran más fáciles, parecía que ya esto se había convertido en mi vida, matar a inocentes que se interponen no era relevante para mí, solo me importaba Jackie. Eso creía hasta que me di cuenta de que todo esto lo hice porque quería mi propia felicidad, no la de Jackie...el día en que recibí las malas noticias no encontré felicidad ni para mí ni para ella.

¿Que acaba de... decir?

La paciente... ella ya no tiene salvación - dijo aquel temeroso doctor.

¡¿Qué?! ¡No me salga con esa mierda! ¡¿Quieren más dinero no es así?! - lo tome de la bata y lo levante -¡Se supone que debe salvarla para eso es el dinero! - su rostro palidecía.

¡Lo siento mucho señorita! ¡Pero ya no es posible salvarla! ¡Algo malo sucedió! ¡No vivirá mucho tiempo!

¡¿Pero qué mierda dice?!

¡Teníamos miedo de decirle! - dijo de repente.

¡¿Ah?!

¡Teníamos miedo que si le decíamos nos mataría! -comenzó a llorar, al parecer ya sabía quién era yo. - ¡Fuimos unos cobardes! - agache la mirada.

Oye maldito - metí mi mano en mi camisa. - ¡¿Quieres una bala en la cabeza verdad?! - Saque mi arma y le apunte justo en la frente, pero una doctora me detuvo y me miro directo a los ojos.

¡Escuche por favor! ¡Ella no tiene mucho tiempo! ¡Solo podrá hablar con usted a lo mucho esta noche! – cuando dijo eso sentí un hueco en el fondo de mi estómago y solté al doctor, esas eran precisamente las palabras que nunca quise escuchar... Las mismas palabras con las que perdí a mi madre, me sostuve el estómago con ganas de vomitar. - Si quiere hablar con ella será mejor que sea ahora, no sobrevivirá al día siguiente - puso su mano en mi hombro.

Cuando entre a la habitación había varias cosas que no entendía alrededor de ella y una máscara por la cual respiraba.

¿Amber? - cuando la mire estaba muy pálida y apenas parecía poder mantener los ojos abiertos, de inmediato fui y tome su mano.

¡Jackie! - inevitablemente comencé a llorar.

Amber... viniste a despedirte... ¿Es cierto verdad? No puedo seguir - me miro con tristeza y me trato de limpiar las lágrimas. - A pesar de que trabajaste... tan duro para que yo... siguiera contigo Amber - soltó unas pequeñas lágrimas, mientras su mano carecía de fuerza.

Jackie... Tú lo sabias ¿No es así? Sabías que yo seguía trabajando como.

No... No lo digas Amber... te hice cargar con esa culpa... te hice cargar con mi promesa... y aun así trabajaste por mi vida... te perdono Amber, porque te amo como mi hermana...eres la mejor hermana de todas Amber... sin ti no hubiese hecho tantas cosas...

Jackie - me aferre a su mano y seguí llorando con fuerza.

Aun si no lo vi todo... quiero que tu si lo veas... quiero que puedas sentir... que puedas cuidarte y vivir... que encuentres a tu amor... que sonrías.

¡¿Cómo podría?! ¡Eres todo lo que me queda!

Amber... encuentra tu nueva luz... en quien tengas esperanza y protégela para que no se apague... yo... te veré luego Amber... espero que...sea en mucho tiempo - me sonrió como pudo, soltando sus últimas lagrimas solo dijo algo - Gracias...- fue su última palabra.

*Fin del flashback*