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La sonrisa del conejo se esfumó mas rápido de lo que tardo en pestañear, es que no había estado preparado para lo que vería una vez que abrió  la puerta de su habitación. Se suponía que no tardaría nada y volvería a lado de Seh en un santiamén, eso es lo que imaginó, mas ignoro que todo lo que había logrado hacer y formar en el poco tiempo en la academia estaba por perderse por la nueva presencia frente a él, en su propio dormitorio. No sabía si estar felíz por ver a su primo después de tanto tiempo o triste porque sabía lo que significaba que él, estuviese sentado en su habitación.

Había sido descubierto.

Por unos segundos nadie dijo nada, pues Baekhyun se había puesto muy pálido. Jungkook se alarmó relajando su ceño fruncido y corriendo para socorrer a su amigo, que parecía que pronto entraría en un pequeño ataque de ansiedad.

- Baek... que sucede. ¿Estás bien? - no obtuvo respuesta mas que solo un asentimiento del mayor.

Baekhyun suspiró un poco mas lento y profundo, debía controlarse, controlar el miedo que invadió su sistema en cuestión de segundos, en el cual vio a su primo sobre su cama. Dejó la muda de ropa que tenía en el cesto de ropa sucia y se posicionó frente al alfa de inmediato.

- ¿Qué haces aquí? - quería cualquier respuesta menos la cruda verdad que temía recibir.

- Esperaba un recibimiento mas agrable de tu parte siendo tu primo favorito.

- Lo siento - se disculpó apenado, sabía que estaba siendo descortés, pero su mente no estaba procesando toda la situación de una buena manera y lo vulnerable que ahora se sentía bajo la mirada de Taehyung lo ponía en un estado peor. Aun así, sonrió, tan falsamente que se odio, en menos de un año dijo tantas mentiras, que estaba seguro que su conciencia pronto lo abrumaria. Y ahí estaba mintiendo una vez mas, porque lo único que quería decir era que se fuera, que se olvidara por completo de su existencia. Quería a su primo, pero éste le era demasiado fiel a su padre y sabía que solo por esa razón había hecho lo posible para dar con su paradero.

- Te extrañe - el alfa lo abrazó, tan sincero que Baekhyun tuvo remordimientos por desear que se fuera, sus brazos accionoron al fin correspondiendo al abrazo.

Dios, se sentía bien, cerró sus ojos para dejar que las lágrimas fluyeran por si solas. Solo hasta ese momento pudo tener presente cuanto había extrañado a su família, su mamá, sus primos y a su padre. Taehyung le recordaba a él, después de todo ambos eran tigres.

- También te extrañé primo...- se sumió en el cálido abrazo.

Jungkook los miró un poco incómodo, todo era demasiado intimidó entre ellos, mostrando lo que pensaban casi sin expresar alguna palabra. Se sentía un intruso en su propio dormitorio, sabía que tenía que dejarlos solos. Tal parecía que aquellos primos tenían muchas mas cosas de que hablar. Sí, lo mejor era dejarlos solos, además de quería comer un poco antes de su siguiente clase.

- Emm, yo los dejo solos para que puedan hablar

- Jungkook yo...

- Después nos vemos Baek, iré a comer un poco antes de mis clases.

- Gracias - sonrió el omega.

- No es nada, adios - asintió con otra sonrisa mas relajado y caminado hacia la salida.

- Adiós lindo conejito - la profunda voz del alfa y el tono tan meloso en el que lo dijo hizo que Jungkook se detuviera.

- Oh, si adios - No lo miró después de eso, saliendo lo más rápido posible de la habitación. Dios, sus mejillas estaban calientes, es que el coqueteo tan descarado del alfa le afectaba mas de lo que el deseaba - Es un idiota - murmuró para si mismo con las manos en sus bolsillos y caminando mirando el piso - Un idiota atractivo - siseó aun mas rojo.

HÍBRIDOS~ [HunHan y SeBaek]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora