Tú eres mi One Piece《LuNa》《One Piece》

3 - Desconocido

Nami volvió a preguntarse si sus oídos estaban bien, esa chica rubia estaba diciendo que era una diosa bueno, no parecía ser mentira pues estaba flotando y trasmitía una gran paz con el simple hecho de estar cerca de ella.

Nami: ¿una diosa?... ¿cómo Enel? ¤ la navegante recordó que no era la primera vez que se encontraba con un dios ¤

Layla: no me compares con ese autoproclamado e incompetente dios de Enel. ¤ le dijo cortante, parecía que se había enfadado, aunque su rostro seguía tranquilo ¤

Nami: ¤ pensando ¤ ¿incompetente? Pero si él casi nos mata ¤ pensó con una gota en la cien ¤

Layla: puedo ver que estás pasando por una mala situación ¿cierto? ¤ le dijo para luego mirar a Luffy que seguía en el suelo ¤

Nami: ¡! ¤ no dijo nada, su vista se dirigió a su amigo ¤

Layla: ese chico va a morir.

Nami: ¿qué? ¤ mirando a Layla, sus palabras la habían asustado ¤ ¿qué has dicho? ¤

Layla: lo que oíste, ese chico antes de mañana, morirá ¤ hizo una pausa, al ver la cara sorprendida de la peli naranja siguió hablando ¤ nauseas, mareo, cansancio, fiebre, dolor, extrañas marcas en su piel eso es lo que tiene ¿verdad?

Nami abrió más sus ojos, Layla había acertado con todo lo que tenía Luffy, y ni siquiera se había acercado a ellos.

Layla: pronto empezará a faltarle el aire ¤ cerrando sus ojos ¤

Nami: ¿ha? ¿qué estás diciendo? ¿cómo puedes saber todo eso? ¤ algo no andaba bien ¤

Layla: porque la enfermedad que tu capitán tiene se la introduje yo ¤ dijo tranquila ¤

Nami: ¿qué quieres decir? ¤ sin poder entender ¤

Layla: ese chico, Monkey D. Luffy recibió mi maldición al romper mis reglas, y mi maldición es una terrible enfermedad incurable que te irá haciendo sufrir y te matará lentamente

De repente Luffy comenzó a toser con fuerza y comenzó a respirar con algo de dificultad, aunque seguía inconsciente.

Nami: ¡Luffy! ¤ se giró hacia él en un movimiento rápido ¤

Layla: ¿ves? El aire no está llegando completamente a sus pulmones, pero no te preocupes, estará bien por ahora, no llegará al amanecer

Nami se asustó, sabía que Luffy estaba muy enfermo, pero no como para que su vida peligrara, incluso no llegaría a la mañana, las predicciones de Layla estaban en lo cierto, Luffy respiraba con más dificultad que antes.

Nami: ¤ a la diosa ¤ ¡¿hay alguna forma de salvarlo?! ¤ se estaba desesperando ¤

Layla: no ¤ cortante ¤

Los ojos de Nami se abrieron más que antes.

Nami: ¿por qué? ¿qué hizo mal? ¿en qué momento rompió tus reglas? ¤ le gritó ¤

Layla: en realidad todos ustedes las rompieron ¤ Nami la miró con duda ¤ poner un pie en esta isla está prohibido pero, entrar en mi templo está completamente prohibido.

Al instante Nami recordó cuando Robin le había gritado a Luffy que se alejara del templo.

Layla: tu amiga intentó advertirle pero fue muy tarde ¤ cerrando los ojos ¤ el resto de tus amigos están en una situación parecida a la de él ¤ mirando a Luffy ¤

Nami: ¿qué? ¿todos?

En otro lado de la isla Sanji estaba tirado en el suelo boca abajo, a su lado Zoro estaba arrodillado apoyándose en una de sus espadas, temblaba ligeramente y miraba a un tigre que estaba frente a ellos.