Eres Mío | YOONMIN

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Con el paso de las semanas, Taemin y Jimin se habían hecho muy cercanos. Pasaban horas de clase y almuerzo juntos. A veces se visitaban los unos a los otros o dormían en sus casas. Lee se había comenzado a enamorar de su amigo y claro, Yoongi lo había notado. No le agradaba en lo más mínimo pero no sería quién para intervenir. Él día de clases había llegado a su fin y tras dejar que Min se alimentara, Jimin se arreglaba como podía. Iría a visitar a Taemin. Yoongi limpió su boca con un pañuelo para eliminar los rastros de sangre e hizo una mueca.

-¿Estás tomando suficiente agua?-Jimin asintió sin mirarle-¿Qué hay de la comida?-asintió nuevamente-...¿Estás durmiendo bien?-Jimin no hizo ningún gesto y Yoongi rodó los ojos.

-No.-admitió avergonzado.

-¿Es por él?- el menor emitió un leve color rosado tras pensar en el chico- Escucha, no me interesa lo que hagan pero si vas a ser de lo que me alimente, necesito que te cuides. No te ofendas pero... hoy sabes horripilante. Sería bueno que descanses un poco, Jimin. Y no, no me estoy preocupando por ti, mocoso.-explicó rápidamente para no permitirse tener una imagen vulnerable.

- No puedo descansar...-.

-¿Y por qué?-cuestionó algo irritado.

-Yo... yo... he pensado en besarlo. Pero jamás lo he hecho, no quiero hacer el ridículo con él. Sería incómodo, sin mencionar extremadamente vergonzoso.-reconoció en un suspiro.

-¿Así que es sólo eso?-rió- Eres patético, Jimin. Es sólo un beso, no seas ridículo.-se burló.

-Bueno, disculpe, Señor "se besar desde el jardín de niños". No todos hemos vivido lo suficiente como para tener un certificado en besos franceses.-respondió Jimin irritado, Yoongi lo miró con seriedad y luego de unos minutos habló.

-Ven aquí.-.

-¡Ya bebiste! ¡No puedo dar tanto en un día!-protestó.

-Park Jimin.-le llamó firme, por lo que sin remedio, decidió ir hasta el escritorio donde se encontraba.

-¿Qué quieres?-.

El mayor no respondió. Contempló los ojos de Jimin por unos largos segundos antes de colocar una de sus esbeltas y pálidas manos en su cintura para atraerlo. Park lo miró con confusión pero permaneció callado mientras otra mano tocaba su mejilla. Era fría, suave, agradable al tacto. Yoongi besó sus labios sintiendo una ola de calor invadir su cuerpo. El menor era tan cálido, tan vivo.

Confundido y aturdido, él más bajo correspondió moviendo sus labios a la par que su acompañante. Estaba cautivado por aquél dulce sabor. Quería más. Era demasiado bueno.
Sin embargo, sus plegarias no fueron concedidas. Yoongi se apartó y limpió su labio inferior con su pulgar.

-Listo, sabes besar.-dijo sin importancia- Luego de tu salida..-.

-Cita.-corrigió Jimin.

-Lo que sea.-continuó él- Descansa y come bien. Lo menos que quiero ahora es que tengas insuficiencia de hierro y me mates de hambre. Sería la muerte más absurda que podría tener.-.

El chico sólo asintió aún algo aturdido por todo aquello. De ninguna forma eso podría significar algo. Al menos no para él. ¿O sí...?