Luz de luna.

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Kayano.

—Ya me voy
—¡Si, que te vaya bien!

Las últimas palabras que nos dedicamos esta mañana. Ya han pasado dos horas de que debió haber llegado. Realmente suele molestarme un poco que le dediqué más tiempo a sus alumnos que a mí. No le importa que tenga que calentar la comida de nuevo, o que llegué tarde a casa cuando ya estoy dormida.

—Ese tonto — dije mientras ponía mi plato sucio en el lavavajillas — Dejandome cenar sola por cuarta vez esta semana.

Como Profesor es bastante bueno. Pero, siempre pone sus deberes por sobre todo. Aguantarlo no ha sido sencillo.

Luego de aquella primera cita comenzamos a salir. Pero era un noviazgo algo extraño. Casi no lo veía porque él tenía que ir a impartir clases. Yo por mi parte, seguía actuando, pero decidí tomarme un descanso cuando me di cuenta que si lo hacía, tendría más tiempo para pasar con él.
Las cosas mejoraron, nos veíamos más seguido, pero igual, si un alumno requería de su ayuda, yo siempre lo dejaba llegar tarde a las citas o irse antes de tiempo. Ahora casados, las cosas no han cambiado mucho.

—Realmente seguiste los pasos de Koro sensei.

A pesar de todo no me arrepiento en absoluto. Siempre se termina sintiendo culpable, lo cual me demuestra que realmente le importó. Además, mi hermana era igual, así que se que si ella estuviera aquí hoy me diría algo como "Nagisa es un gran Maestro, y un Maestro siempre se preocupa por sus alumnos" tal como hacía ella.

—¡Ya llegué! — escuché en la sala y luego el sonido de la puerta cerrarse.
—¡Vaya! No hay remedio contigo ¿verdad?
—El entró al comedor — Lo siento, lo siento.
—Ya lo sé. No es la primera vez que llegas tarde. Alegrate de que la comida aún esta caliente.
—En serio, perdón — dijo mientras me tendía una bolsa de plástico.
—¡Que sepas que el pudín no me mantendrá contenta siempre! — dije mientras tomaba la bolsa y sacaba uno.
—Sí — dijo aún apenado y sentándose a la mesa.
—¿y bien? ¿Que pasó esta vez?
—Los exámenes se acercan. Algunos están bastante nerviosos. Doy mi mejor esfuerzo, pero yo no puedo dar clases al mismo tiempo para todos mis alumnos, como Korosensei.
—Ya lo sé — puse el plato de comida frente a él.
—¡Se ve delicioso! Gracias.

Seguimos platicando de su día hasta que el término de comer.

—Bueno, iré a descansar si no te molesta — le dije.
—Esta bien.

Camino a mi habitación me encontré con un paquete grande en la puerta.

—Nagisa.
—¿si?
—¿Tu trajiste esto?
—se puso a mi lado — Si. Perdona, se supone que no estaría listo hasta nuestro aniversario, pero mi alumno se entusiasmo demasiado.
—¿Eh?
—abrelo.
—b..bien.

Comencé a quitarle el papel que lo cubría. Era una pintura de la luna creciente y nuestra escuela, con mi hermana observándola.

—Esto es...
—¡Feliz aniversario adelantado!

Las lágrimas corrieron en mi cara. Abracé a Nagisa.

No me arrepiento de estar a tu lado.

La luna que nos unió. (Concurso TrueLove)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora