Mujeriego [MINHO&TU] Stray Kids

CAPITULO 8

La realidad la golpeó de repente
como si fuera una ducha de agua fría.
Temblorosa se soltó de Minho y camino unos pasos hacía atrás.
Esperaba que el dijera algo pero no lo hizo,en cambio volvió a rodearla con su brazo y traerla hacía él.

— No intentes huir. -ronroneó Minho

— No intento huir. -susurró ella

— ¿No? ¿Entonces que haces?

— Ser realista

Minho rió.

— ¿Qué? -reclamo ella.

— Que no veo sentido a tus palabras. Te alejas de mi, cuando te mueres de ganas por pegarte mas...ademas,ambos sabemos que cuanta menos ropa; mejor.

______ tosió,no pudo evitar la ola de deseo que le recorrió el cuerpo, el calor que se alojaba entre sus piernas,la reacción de sus senos. Pero si podía ignorarlo.

— Te equivocas -dijo soltándose y agradeció que no le temblaran las piernas.

______ se alejó de el con paso rápido y nervioso,no sabía donde iba,no veía muy bien el camino
pues no pensaba con claridad,su
mente estaba inunda de imágenes que no le hacían ningún bien en ese momento. El cuerpo desnudó de Minho sobre el suyo la torturaba,su sonrisa pícara,sus ojos nublados por el deseo,su boca acercándose peligrosamente a la de ella...

— ¡Maldito seas! -grito en medio de la oscuridad de la noche.

Minho la miro mientras ella se alejaba con una especie de sonrisa
en los labios,aunque quien se fijara lo tomaría mas por una mueca. La había espantado. Bien. No,no esta bien,le hubiera gustado mucho mas a su cama y disfrutar de aquella mujer ardiente. Realmente disfrutaría teniéndola en sus brazos.

Y mucho.

Se termino de un trago lo que estaba tomando y tras pagar la cuenta salió de aquel lugar, dispuesto irse a su casa. Solo.
Esa noche no quería ningún tipo de compañía,bueno eso no era del todo cierto,si la castaña quisiera acompañarlo a él no se negaría en absoluto. Pero era la única compañía que no estaba disponible.

— Por ahora... -se recordó.

Estaba dispuesto a meterla de nuevo a su cama, y hacer posible no la dejaría salir...

Frustrado entro a su casa,sin poderlo evitar,antes de cerrar la puerta se fijo en la de enfrente
¿Estaría en su casa? ¿Sola?
Gruñendo cerró de un portazo.

Era muy consciente de que aquella belleza se podía llevar a cualquier tipo de persona a su cama,si con pasar por delante de alguien llamaba su atención.

Había visto como todo mundo la miraba,los hombres lo habían mirado mal a él,mientras rodeaba con su brazo, y por un momento se sintió dichoso,hasta que había recordado que tampoco era suya.
Con exclamación se dirigió al
cuarto de baño y abrió el grifo de agua fría.

Salió del cuarto justo cuando el timbre de la puerta sonó.

— ¿Quién será? -preguntó al silencio. Con nada más que una toalla alrededor de su cintura se dirigió a abrir.

Era la persona que menos esperaba; su vecina.

Tenía el pelo despeinado,las mejillas sonrojadas,su boca era una recta y sus ojos mostraban confusión. Un nudo se alojó su estómago ¿le habría pasado algo?.
_____ se fijó en las jugosas gotas de agua que bajaban por el pecho de Minho y quiso lamérselas....
aquella toalla no tapaba mucho
y lo peor era que ella lo había visto todo, y no tenía que hacer mucho esfuerzo para recordar nada. Con cerrar los ojos lo podía ver...