Capitulo 3 - Merendamos?

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El sol que entraba por la ventana, despertó a _____.

¡La luz! - exclamó molesta- ¿Por qué no cerré la persiana? - pensó ___ al despertarse. Se frotó los ojos y juntó valor para levantarse. Antes, miró el reloj de su celular. 8:58- Desperté 2 minutos antes que sonara la alarma, ¡bien!- se felicitó.

Luego de ir al baño, darse una ducha, peinarse y cambiarse fue a hacerse el desayuno.

Café y galletitas- pensó y se lo preparó. Se sentó en la mesa que tenía en su monoambiente y comenzó a desayunar. - Tengo que prepararle la clase a Harold- Se dijo y comenzó a recordar como es que le empezaron a enseñar ingles en la primaria a ella- ¡Okey! Empecemos con lo fundamental...- exclamó y escribió toda su clase y la guardo en su carpeta.

Eran las 12.30 del mediodía y se preparó para hacer la comida.

Sonó el celular y corrió a agarrarlo, pero no lo encontraba. Sonaba y sonaba por todas partes y no podía llegar al lugar exacto. Trato de concentrarse y buscar de donde provenía el ruido, una vez que lo hico lo consiguió, ahí estaba, en el baño, en el lavamanos. Pero fue demasiado tarde, la llamada se cortó.

Cuando vio la pantalla de su celular, leyó el nombre de la persona que la llamo: Martin.

Martin era su novio, el cual estaba junto a ____ hacía más de 7 meses y que hasta su llamada de recién, ella no había tenido en su mente.
El era de su ciudad natal al igual que ella y tenia 21, solo 3 años más que ____, ya que ella tenia 18.
En este último tiempo con ____ viviendo en Capital federal y solo volviendo a su ciudad en los fines de semana que tenía libre su relación con Martin no iba muy bien, se peleaban mucho.

Martin era ese chico que cualquiera que lo ve dice "¡Que bombón!" y ____ sentía que estando lejos cualquier mujer iba a poder quitárselo, lamentablemente era muy insegura.
____, era una chica morocha, de estatura media, ojos marrones. No era una chica flaca pero tampoco gorda, era una mujer promedio, una más del montón - pensaba ella.

Pero su novio moría de celos de solo pensar que ___ podía estar a 90 km sola con otro chico. Por lo tanto cada vez que ella iba a su ciudad, lo único que hacían era pelear y cuando estaba en capital se comunicaban por whatsapps o llamadas que si ella no contestaba como en este caso, le traería un grave problema.

Entonces, decidió marcar el número de su novio de inmediato.

Finalmente estaba llamando
El tono sonó dos veces y luego atendió.

-¡ Por fin te acordas de que existo! - le dijo Martin, claramente enojado.

-No encontraba el celu y llegue justo cuando cortaste Tin, no te enojes. - Le explicó ___ a su novio.

- Si, ¿Y ayer? ¿También perdiste tu celular? - Le reclamó nuevamente ya con un tono más elevado.

- ¡Perdón, perdón! ya sé que no te llame, ya sé. Pero juro que estaba ocupada, no lo hago de mala. - se disculpó apenada.

- Si, ¡siempre lo mismo! yo tengo que llamarte, yo tengo que mandarte mensajes, whatsapp. TODO yo, ¿y vos? - estaba muy enojado.

-Martin, sabés que la facultad me tiene muy agobiada. Te pedí perdón. Ayer se me pasó, no me di cuenta. -le explicó tranquila. A ella no le gustaba pelear con él, con nadie en realidad.

- ¿Y no pensas en mi? ¿No me extrañas? Claro. - soltó irónico - ¡Esta bien, ___ !hace como quieras. - dijo manipulador.

-No, amor. ¡No es así! ¿Cuanto hace que nos conocemos? ¡Me conoces! Te amo y te extraño todo el tiempo, pero de verdad ayer fue un día muy complicado. - le explicó sinceramente.

Hoy y siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora