Capitulo 6 - Pasta?

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Eran las 5 de la tarde y Harold se preparó para salir del departamento y al abrir la puerta se encontró con ______ en el piso, abrazando sus piernas y por lo que veía, estaba llorando. Le rompió el corazón verla así, no podía permitir que una chica tan linda y buena llore.

Se dirigió lentamente hacia ella y se sentó a su lado.

___ se dió cuenta que alguien estaba a su lado y levantó la mirada. Al ver que era Harold sintió mucha vergüenza y corrió la cara hacia otro lado, así el no la veía.

- Hey! - le dijo atajándola y agarrándole el rostro muy tiernamente del mentón- don't cry, please- le dijo con la voz más dulce que ella había escuchado alguna vez y le secó las lágrimas que corrieron con más facilidad que antes.

Él la agarró y la abrazó, ella apoyó su cabeza en el pecho de Harold.

Harold quería cuidar de ella, el sentía que ____ iba a ser una persona muy importante en su vida y necesitaba estar a su lado, no quería que nadie la vuelva a hacer llorar.

____ no quería soltarlo, sentía que a su lado estaba cuidada, a salvo. Aunque se sentía muy triste, al lado de él estaba un poco mejor. En sus brazos estaba en paz. Lo quería en su vida.

Él la levantó, y le volvió a secar las lágrimas, la tomó de la mano y la llevó a su casa.

Le indicó que se sentara en el sillón.

- Tea or coffee?- le preguntó con una sonrisa.

- Tea - le dijo ella tímidamente entre sollozos tratando de sonreír, aunque fue inútil. Él fue hacia la cocina a preparárselo.

Una vez con las infusiones en sus tazas y sentados en el sillón,  ____  estaba más calmada, gracias a que Harold la habia tranquilizador con su mano en el hombro acariciándola lento.
Con un tono dulce y tranquilo le preguntó- ¿Vos por que llorar? - ____ se ahogó con el té.

- Emm... yo... - ella estaba incomoda, no quería volver a tocar el tema pero al mismo tiempo, si iba a hablar de nuevo de eso quería hacerlo con él.

- Your boyfriend? - le volvió a preguntar.

- Si. - dijo ella mirando hacia abajo.

El se quedó pensando un buen rato, ya que no sabia muy bien como decir lo que quería decir.

- No pasa nada igual - le dijo intentando sonreir, nuevamente no lo logro.

- ¿Hacer él something bad? - le dijo él, mezclando los idiomas. La verdad que no le importaba si quedaba mal, necesitaba entenderla y ayudarla.

Ella rió un poco, al escuchar como había formulado la pregunta- no, no me hizo nada malo. Discutimos. - respondió con algunas señas.

- ¿Pelea? - preguntó Harold mirándola a los ojos. Realmente quería entenderla bien, así la podía ayudar.

- Emm... si, hablamos- le dijo haciendo señas con la maño y la boca- y peleamos.- concluyó.

- Vos no tener llorar - dijo el mirándola a los ojos y se acercó a acariciarle la mejilla. Ella sonrió y le agarro la mano que tenía en su mejilla.

- Gracias Harold... ¿podemos cambiar de tema? - Le dijo ella tiernamente- no quiero volver a llorar- siguió lentamente, así el entendía. Dejó el té en la mesa ratona que estaba junto a ella.

- Tenemos que empezar con la clase de español- le dijo ella.

- Si. Bueno. - dijo Harold.

Y así fue, estuvieron dos horas estudiando, Harold aprendía rápido, hacia la tarea muy bien teniendo en cuenta que el español es muy diferente al ingles. Como habían empezado a las 6, terminaron a las 8.

- Bueno, terminamos, muy bien Harold- lo felicitó ___.

- Gracias profe - le agradeció él y ella se rió.

- Profe - dijo entre risas- es muy gracioso. - le comentó.

- No te gusta? - le pregunto él.

- Si, si me gusta!- le confesó. Ella se estaba preparando para ir.

- Queres tu quedarte a comer? - le dijo Harold a ____ cuando ella se levantó del sillón.

- Emmm... ¿no te estoy molestando? - dijo ella- ¿no te jodi mucho ya?.

- Ehh emm - no había entendido mucho lo segundo que dijo, pero él quería que se quede asique le insistió- quedate ___ dale. Yo cocinar- concluyó haciendo puchero. A ella la derritió y no tuvo más opción que aceptar.

- Bueno, está bien. - le dijo con una sonrisa. Y a él se le dibujo una sonrisa de oreja a oreja, deslumbrante, brillante, perfecta- ¿Que vas a hacer de comer? - le preguntó.

- Soy muy bueno con... Se em... mash... em...- agarro el traductor de su celular- amasar- dijo pronunciado mal, amasar.

- ¿Si? Wooou! ¿Pasta? ¿Espagueti?- le preguntó sorprendida y riendo, se sentía mucho mejor.

-¡Si! - dijo feliz.

-¡Me gusta!- dijo ____.

Harold buscó todos los ingredientes para hacer tallarines y ___ lo quiso ayudar. Se pusieron los delantales y el tenia un gorro de chef, ____ lo vió y se lo puso, le quedaba lindo y divertido.

El empezó con la mezcla. - Huevos- le dijo y ella le alcanzo los huevos- Gracias- le agradeció.

Y así empezó a formar la masa. ____ lo miraba atentamente. Él la vió observándolo y se pasó harina por la mano y la lleno a ella con el polvo blanco.

____ gritó sorprendida pero no de angustia, sino de felicidad, y comenzó a reírse, y se vengó haciendo lo mismo, pero esta vez, en los rulos de él.

Luego de una "guerra" de harina, los dos terminaron riendo y Harold quedó serio de un momento al otro mirándola.

- ¿Qué? - dijo ella riendo, llena de harina.

- A mi me gusta cuando sonreír vos- le dijo tierno- no quiero que llores nunca.

______ sintió las mejillas arder y lo único que pudo hacer fue sonreír tímidamente y decir - gracias.

Luego de una hora la comida estaba lista, ella había puesto la mesa y ya estaban los dos sentados.

- ¡Que rico!- dijo ella probando los tallarines que le había preparado el ruliento.

- Gracias- dijo él.

Y así, comieron entre risas y miradas traviesas.

Luego de una hora aproximadamente, ____ miró el reloj.

- ¡Wou, pasó mucho tiempo desde que entre a esta casa!- dijo sorprendida.

- ¿Eh? - preguntó Harold que no había entendido.

- Es tarde- dijo señalando el reloj y haciendo seña de que tenía que dormir- eran las 10.30 de la noche- mañana tengo universidad.

- ¡Ah! ¡si! Bueno, te... emm, can i... puedo acompañar vos a la casa?- dijo Harold con mucha dificultad.

- Si- dijo ella sonriendo.

Y eso hizo, él la acompaño hasta la puerta de su departamento, que quedaba en diagonal al de él.

- Gracias - lo miró a los ojos - por todo.

- De nada, cuando vos quieras yo estar- dijo él sonriendo.

Y ella le dio un beso en su mejilla- Hasta mañana Harold.

Hasta mañana ___ - y así cada uno entro a su hogar.

Hoy y siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora