Respiraciones agitadas, cuerpos transpirados, adrenalina maximizada, músculos contrayéndose por el constante esfuerzo físico era todo lo que se percibía en aquel lugar. Un cuerpo que parecía no poder más, pausaba sus movimientos, tomando respiraciones profundas que le ayudaran a regular su respiración.
- ¡Santo Dios! - Pronuncio un joven apuesto con complicidad dejando de hacer presión en las rodillas de la otra. -Deberiamos hacer esto más seguido- agrego mientras observaba con burla a la chica
-Oh Dios- murmuro apenas audible, dejando escapar un pequeño gemido de dolor con voz totalmente ronca.
- ¿Te sigue doliendo?- pregunto con el ceño fruncido en señal de reproche - ¿Quieres que lo saque? - volvió a preguntar aun sabiendo la respuesta, sonrío cuando recibió una negación en gestos
-No, puedo seguir... solo vamos despacio. Duele un poco-
-Creo que deberíamos parar- propuso levantandose del pasto algo verdoso y mirando el cuerpo transpirado y agitado de su acompañante
- ¿Hablas en serio? - Su tono cansado denotaba su indignación -Estamos por acabar, si quieres retirarte bien, puedo hacerlo perfectamente por mi cuenta-
El chico solo sonrío y negó con la cabeza
-Quiero que lleguemos juntos... tu y yo bebé- dijo coquetamente golpeando cariñosamente la punta de la nariz de la otra quien sonrío leve y dio un pequeño empujón a sus hombros para seguir su marcha dejándolo atrás con una sonrisa y sus ojos clavados en sus curvas.
-¡Deja de mirar mi trasero y trae el tuyo aquí, idiota!-
Riendo por la astucia de aquella chica, se puso en marcha. Agradeciendo que solo faltaran un par de metros por llegar a la gran cima. De lo contrario su compañera sufriría una amputación en su pie solo por ser tan testaruda y no aceptar que su pie estaba sufriendo las consecuencias de su torcedura tras ir subiendo la empinada montaña, su pie derecho estaba realmente hinchado cuando lo ignoro y volvió a encerrarlo aun con dificultad en su tenis deportivo.
Pero claro que aquella deslumbrante e independiente mujer no iba a permitirle sacar su zapato y llevarla en su espalda cuesta arriba.
- ¡Al fin!- exclamo apenas llegaban al extremo de la dichosa montaña. Tirándose sobre el pasto verde boca abajo totalmente derrotado. - ¿Crees que podemos pedirle a Iziie que nos mande un LSPDF? Porque siento que si me pongo de pie nuevamente, solo llegare rodando- exagero ganándose una sonrisa burlona de la chica
-Seguro. Iziie y Theo parecen llevarse muy bien últimamente. Seguro si le pide ese favorcito no le importara tomar prestado un helicóptero de uso exclusivo para misiones de rescate para salvarle el culo a los amigos de su chica y sumarse unos puntos de más- ironizo consciente de lo que provocaría la mención del chico SWAT, como se habían acostumbrado a llamarle desde que la amiga de ambos se los había presentado como su nueva cita
La sonrisa del muchacho desapareció por un momento al escuchar esas palabras
-Ella no es la chica de nadie- Aseguro -Y seguro como el infierno que el día que acepte ser la chica de alguien, será mi chica- sentencio. Haciendo que su amiga alzara una ceja en cuestionamiento a su comentario. -Cuando estemos listos para pertenecer el uno al otro- Aclaro, encogiéndose de hombros.
La chica en cuestión solo sonrío y se sentó llevando sus rodillas a su pecho, sin ser capaz de comprender el juego que sus dos amigos y colegas jugaban. Se gustaban, se llevaban bien, no paraban de coquetear y según la versión de ambos, en la cama eran el uno para el otro. ¿Por qué no aceptar lo que sentían y dejar esa regla de "sin sentimientos hay más diversión y menos presión"
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Peligrosamente [CAMREN]
FanfictionADVERTENCIA: Contenido no acto para personas sensibles. Contiene, escenas fuertes; lenguaje explicito violencia, asesinatos, misterios, venganzas, traumas, sexo crudo y más. "En un juego donde mentir se vuelve rutina, traicionar en monotonía y amar...