Es una historia que se abarca en la vida de una chica de 17 años, que tuvo que tomar una decisión la cual le dará un gran giro a su vida...
Ese giro que la llevará a meterse en un mundo oscuro con tan poca edad, en la cual no tendrá escapatoria, per...
Estoy soñando o... ¿Tyler está en mi balcón? Ohh Dios, ¿Qué hace él aquí? Y de paso, yo estoy en pijama, bueno, tengo que hacerlo pasar, debe estar congelándose afuera. Decido abrir la ventana para que pase y entra.
-Hola Dea.-Me dice éste mientras intento quitar mi cara de dormida-.
-Hola, ¿Qué haces aquí a esta hora?
Se me queda mirando de arriba hasta abajo y mis mejillas se colocan muy rojas.
-¿No puedo visitar a una dama tan hermosa? Me has dejado muy cautivado Dea.
-Nos acabamos de ver hace un rato, ¿No era suficiente?.-Se me acerca tanto que comienzo a temblar-.
-Sin estar a tu lado, para mí nada es suficiente.-No puedo evitar sonrojarme, pero éste cada vez se me acerca más-.
En ese momento que está a punto de besarme recuerdo todo lo que Marco me ha dicho con respecto a los hombres, no puedo demostrar mi debilidad ante ellos, jamás. Así que rápidamente doy un giro y éste cae al suelo de una forma muy graciosa, y no puedo parar de reír.
-¡Diablos! ¿Qué sucede Dea, acaso te colocas nerviosa cerca de mí?.-Me dice éste, ¡Obviamente me coloca nerviosa!-.
-¿Y quién te crees tú para tratar de besarme?- Veo que se coloca molesto y frunce su ceño-.
-Si así lo ves, está bien.- Dice éste con un tono de sarcasmo-.
-Bueno, ya te puedes ir, ¿O acaso piensas quedarte toda la noche?-Digo con muuucho sarcasmo-.
-Tranquila Dea, no me corras, no hace falta, me iré yo solo.- ¿En serio? Yo quería que se hiciera el difícil pero veo que es una nena-.
Ya cerrando mi ventana, después del que él saliera, decido volver a dormir, enserio fui una tonta al correrlo cuando lo único que quería era que se quedara a mi lado, decido dejar de lamentarme y volver a dormir, ya estoy muy agotada.
A la mañana siguiente Lía pasa por mi habitación muy temprano para avisarme que Marco necesitaba verme, ¡Pero que diablos, acaso esta gente no duerme! A duras penas me puse de pie y fui al baño para arreglarme, me vestí de una manara muy sencilla y bajé.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Al llegar a su oficina decidí entrar sin tocar, y... ¡No puede ser! ¿Qué hace Tyler aquí?
-Hola, ¿Me estabas llamando?- Noto que Tyler le da un codazo a Marco, y éste se ríe-.
-Sí pequeña, iremos a desayunar e irá Tyler a acompañarnos.-Dice éste mientras salimos todos de su oficina-.
-Me parece un gran idea.- Dice Tyler y yo volteo los ojos-.
Subo rápidamente a mi habitación y me coloco algo más adecuado para la ocasión.
Llegamos al restaurante y hacemos el pedido, mientras esperamos Marco me dice: