Mi historia entre cuerdas

Cap 7/ el peor castigo

Mi papá: Vaneza sinceramente estábamos pensando en dejarte ir todos los fines de semana a visitar a tus amigos, pero gracias a tu comportamiento nada de eso va a suceder, en cambio te prohibimos volver a hablar con cualquiera de ellos.

Yo: (corrí hacia mi nuevo cuarto y empecé a llorar)

En mis pensamientos:

Como pude ser tan tonta, pude haberme quedado con ellos y simplemente esperar a oír cual era el trato, pero no, (sollozos) , simplemente tuve que ser una estúpida.

Hay algo que no había mencionado, y es que en los momentos más tristes yo me pongo a tocar violín, así no sean las canciones mas fantásticas o profesionales me gusta bastante y mientras toco tengo tiempo de pensar en todo, en lo que hice mal y en lo que tengo que mejorar.

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Lapso de tiempo

Ya llevo una semana en mi nuevo colegio y todavía no tengo ni un solo amigo, todavía no supero lo sucedido, lo único que me ha consolado es mi violín y un libro. Mis padres para asegurarse de que yo no hablara con mis amigos me quitaron el celular y no me lo devuelven hasta...la verdad no se hasta cuando me lo devuelven, pero, lo único que hago ahora es despertar, ir al colegio, llegar a mi casa, hacer tareas, tocar violín y dormir, casi ni siquiera como, y no se asusten, no es porque no quiera si no que en mi casa estamos muy escasos de plata y cada peso cuenta (son pesos colombianos).

Un día estaba en mi casillero y un niño se me acerco, y me dijo:

El niño: hola, he visto que no eres muy sociable.

Yo: hola, si, supongo

El niño: bueno, me llamo kevin

Yo: Vaneza

El niño, ahora Kevin: bueno me alegro conocerte.

Yo: a mi igual creo.

Kevin: adiós

Yo: adiós

Si, lo se fui un poco, mas o menos, demasiado, seca con el, pero sinceramente no quiero tener amigos ni amigas ni nadie, solo quiero a mis amigos reales, Sofia, Diego y Mateo, los extraño demasiado, me siento muy mal, muy triste, muy depresiva, pero supongo que eso se pasa, o yo que se, sinceramente no me interesa.

Al día siguiente en el colegio después de salir a reseso:

Yo: (salí de el salón y me dirijí hacia mi casillero)

???: hey tu¡ si la amargada¡ ven aquí¡

Yo: (lo ignoré totalmente y me fui caminando por el pasillo)

???: (Me tomó el hombro y me dijo) recoge eso (me dijo eso luego de haber tirado el libro que estaba leyendo) haber perrito recógelo (en ese momento todos los que estaban en el pasillo se acercaron a ver lo que estaba pasando)

Yo: no tengo porque obedecer te, hasta puedo dejar el libro en el suelo y luego me compro otro, permiso, -cuando retire la mirada de ese niño me di cuenta de que todos ya habían formado un circulo al rededor de nosotros y no me dejaban pasar, luego alguien entre esa multitud de estudiantes grito- haber perrito recógelo -y se escucharon unas risas, luego, el niño que me estaba molestando desde el comienzo me grito- OBEDÉCEME -rápidamente me agache a recoger el libro, pero mientras me dirijia hacia el, todos se empezaron a reír a carcajadas, cuando me agache a recogerlo todos se acercaron y le dieron paso al niño que desde un comienzo me estaba molestando, su nombre era Santiago. Santiago me pego una patada y luego se marcho igual que el resto de estudiantes.