Haikyuu!!~ [Chats & Posts]

#2

Sugar♥ [Chat Daichi]

Sugar♥: te pasaste (;´ρ')

Daichi: perdón, no me pongas las caritaaas.

Sugar♥: ahora me duele todo! ＼(*｀∧´)／

Daichi: ven a mi casa.

Sugar♥: no puedo, duele! (╥﹏╥)

Daichi: Suga... No quieres verme? 😢

Sugar♥: no es eso! Mejor ven tú a la mía. o(*^▽^*)o

Daichi: no hace falta que me lo digas, estoy en la puerta de tu casa. Voy a entrar, ok?

Sugar♥: cierra la puerta con llave. ヽ(●´∀｀●)ﾉ

Daichi: si si, gracias por darme una copia de las llaves.

√√ 17:56

Bonus:

—Perdona Suga, creo que me excedí un poco —dijo el moreno arrepentido.
—¿Un poco? —preguntó irónicamente y arqueando una ceja.
—No me pongas esa cara...

El capitán se sentó en la cama del peligris y le abrazó.
Sugawara apoyó su frente sobre el pecho de Daichi y le devolvió el abrazo.

—Aún así te quiero —susurró el vicecapitán.

[~*~]

Cosita naranja [Chat Kageyama]

Cosita naranja: Kageyaaaaamaaaaaaaaaaaa.

Kageyama: qué?

Cosita naranja: quieres entrenar conmigo?

Kageyama: ok, voy ahora.

Hinata: por cierto...

Kageyama: dime.

Hinata: mi... Hermana pequeña quiere conocerte y mi madre pregunta que si quieres quedarte a dormir... \(•//_//•)/

√√ 17:54

Bonus:

—Hinata boke, deja de moverte tanto —regañó el armador.
—Es que no encuentro ninguna posición cómoda para dormir... —protestó el pelinaranja.

Kageyama suspiró y se sentó.
Colocó a Hinata entre sus piernas y se tumbó de nuevo.

—¿K-Kageyama?
—Calla y duerme, boke.

[~*~]

Tsukki~ [Chat Yamaguchi]

Yamaguchi: Tsukki!

Tsukki~: qué quieres?

Yamaguchi:  mira!

Yamaguchi:

Tsukki~: ...

Yamaguchi: qué tal me ha salido?

Tsukki~: bien... Pero yo llevo cascos no auriculares.

Yamaguchi: cierto, pero con auriculares podemos escuchar música juntos!

Tsukki~: cállate Yamaguchi.

Yamaguchi: perdón Tsukki! Pero es verdad, me gustaría saber qué tipo de música escuchas! ٩(๑❛ᴗ❛๑)۶~

Tsukki~: ven a mi casa, te enseñaré algunas canciones.

Yamaguchi: sí Tsukki!!!

√√ 17:45

Bonus:

—Waa~ ¡Qué bien cantan! —exclamó el pecoso.

Tsukishima asintió y puso su brazo alrededor de la cintura de su novio, acercándolo. Le plantó un suave beso en la mejilla. El peliverde se sonrojó de pies a cabeza y empezó a jugar con las mangas de su chaqueta.

«Qué lindo» pensó el rubio.