Capitulo 1

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A los 23 años se supone que tu vida tiene que tener sentido, aún si viviendo en Seattle no tenía ni idea que estudiar y termine tomando unos años para relajarme y pensar o tomar la esporádica decisión de vivir en Quebec Canadá, donde alquile un apartamento con la ayuda de mis padres y me sentía más que tranquila de tener mi vida un poco en orden. La cuidad era un poco fría pero mantenía una relación amor/odio con el invierno ya que no importaba cuantas prendas de ropa tuviera encima siempre tenía la nariz congelada y debía tomar varias tazas de café en el día para mantener un poco el calor.

Alejarme de mi familia no fue tan difícil pero aun así extrañaba a mis hermanas pequeñas Lillian y Chloe, el ambiente tal vez era un poco abrumador para mi padre ya que al estar rodeado de 4 señoritas en la casa incluyendo a mi madre Larissa siempre ganábamos en la toma de decisiones y al final el se termino acostumbrando a ir llevarnos al parque cada tarde y pasar fines de semana en familia.

Siendo la mayor la cosa se torno un tanto extraña cuando nací, quien no conociera a la familia podría intuir que no parecía la hija de mis padres ya que físicamente estábamos de lados opuestos, mis madres tienen raíces griegas e italianas por lo cual tienen aspectos bronceados, cabellos castaños y características muy marcadas de sus rostros, por otro lado mi cabello tiraba más que todo al rojizo, mis ojos a la luz daban esa misma apariencia aunque no era tan notoria, mi piel es sumamente blanca y por más que he intentado tener algo de color a la luz del sol esto nunca fue posible y me canse de intentar cambiar mi apariencia. Esto claramente causo conflictos con mis padres cuando naci y luego de esto ya que mis dos hermanas si tenían definidas sus raíces de acuerdo a mis padres.

Me desperté temprano el día sábado por la luz de la ventana y sintiendo el helaje de la mañana, el reloj marcaba las 6:30am y luego de estar revisando el celular un buen rato caí en cuenta de la fecha, 13 de diciembre ¡La entrevista de trabajo!.

Aunque me había levantado con tiempo me apure al colocarme ropa comoda para salir a hacer un poco de ejercicio, ate los cordones de mis tenis y mientras iba a la cocina me hice una cola de caballo rápida, saque un vaso de la despensa y serví un poco de jugo de naranja que de inmediato me levanto el ánimo.

Tome mis llaves y cuando iba de salida escuche que entraba una llamada a mi celular.

-Hola So ¿Cómo estas? - contesté con una gran sonrisa. Sophia es mi mejor amiga. Tiene 22 años, es muy guapa y ama dibujar. La conocí en la universidad, ella estudia Diseño gráfico y yo, derecho. Es una de las pocas amigas que tengo y la quiero como una hermana.

-No estoy muy bien... necesito hablar contigo, algo pasa con mis padres - sentía en su voz lo preocupada que estaba - estoy llena de ideas pero no sé cual usar...

-Escucha yo...-

-... no sabía si llamarte, pensé que estabas dormida, pero tú te levantas temprano. Pero pudiste tomarte la mañana libre, pero tampoco lo creía posible...-

-Mmm voy de salida..-

-... estoy cansada, no pude dormir. Sabes que mi sueño no es profundo y menos cuando este tipo de cos..-

-¡Sophie! estoy a punto de salir... En 40 minutos paso por tu casa, ¿Te parece?"

-Está bien... Te espero- Contesto con un tono más tranquilo.

Al cortar la llamada nuevamente seguí mi camina aunque pensativa por la llamada de m amiga, sus padres se estaban divorciando y para ella estaba siendo muy duro así que entendía su ansiedad. Conecte los audífonos al celular y puse música en aleatorio, comenzó a sonar Ours de Taylor Swift y sinceramente era una de mis favoritas.

"Elevator buttons and morning air..."

Al estar en la calle de inmediato una brisa de aire recorrió todo mi cuarto haciéndome temblar un poco y comencé a acelerar el paso a un parque cerca de mi casa para entrar en calor, tenia la intención de tomar aire y despejar la cabeza más que de hacer ejercicio pero debía aprovechar el día que se tornaría largo luego de encontrarse con Sophie.

El parque normalmente estaba concurrido a esta hora pero en el momento solo me encontraba yo, comencé a trotar aumentando el ritmo de a poco y me sentí un poco incomoda al estar sola en el parque, casi siempre se encontraba con Nora, una vecina que vivía no muy lejos del lugar con sus dos hijos y ella si se tomaba la parte de ejercitarse ya que siempre estaba dos o hasta tres horas allí.

Luego de una media hora de correr y divagar por mi mente ya que me sentía un poco nerviosa por la entrevista pero nada malo podía pasar, me levante positiva esta mañana e iba con todas las intenciones de obtener el trabajo hoy en una firma de abogados de la cuidad. Pare unos minutos para calmar mi respiración y estirar mis extremidades ya que las sentía un poco acalambradas. Al detener la vista en mis manos vi mis dedos en especifico de un color azul , por un segundo pensé que podía ser el frio de la mañana pero había estado en temperaturas mucho más bajas y eso nunca había sucedido, cuando mire fijamente el color azul se estaba tornando morado oscuro y ahí empezó el pánico en mi.

Apague la música y con la mirada busque a alguien en el parque, aunque no estaba muy alejada de las calles más transitadas nadie estaba en ese lugar, el pánico se duplico y empecé a desesperarme pero esto todo lo que hizo fue que tuviera que esforzarme más al respirar y con cada bocanada de aire la siguiente se hacía mas difícil.

Mi corazón estaba enloquecido, golpeaba el interior de mis costillas con tanta fuerza que pensé que saldría de mi rompiéndome como un papel. Tomé unas cuantas respiraciones hasta que comencé a notar como mi cuerpo se calmaba. Me lamenté no haber desayunado correctamente, tal vez solo era un mareo o simplemente me bajó la presión sanguínea...

Iba a dar la vuelta y caminar a casa pero sentía un cosquilleo en las manos y piernas, mi sangre no estaba circulando correctamente y me dolía caminar, volví a ver si veía alguien a quien pedirle ayuda pero seguía sin haber nadie.

Un terrible dolor en mi pecho hizo que mis piernas fallaran, cayendo de rodillas al suelo, la sensación de falta de oxígeno me golpeó tan fuerte que quedé recostada en el camino de piedras, mirando al cielo. Mi pecho se contraía con cada bocanada fallida de aire que intentaba mandar a mis pulmones. El dolor en mi cabeza cada vez se hacía más grande. Mis manos estaban ligeramente húmedas por la sangre que brotaba de mis, ahora, rotas uñas... Estaba arañando el suelo. Tenía que calmarme, lo intenté pero puntos negros comenzaron a inundar mi vista y sentí como si el viento susurrara en mis oídos con un sonido insoportablemente fuerte. No tardó mucho para que mi vista se oscurezca por completo y unas confusas imágenes aparecieron de la nada.

Era yo, estaba caminando. Caminando hacia la cima de una montaña. Cuando mi vista se aclaró noté que era un cementerio. Comencé a cavar un hueco con las manos

¿Maté a alguien?

No sabía si había matado a alguien o no... Soloveía oscuridad. Una interminable e incomprensible oscuridad.


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Nueva portada hecha por crazyediti0n muchas gracias ;)

*23/02/15

El Retorno de la HerederaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora