¡Estas perdido SeungCheol!

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— ¿Es cierto qué mi cita con Chanyeol fue un plan? — Jihoon tomó asiento a un lado del pelinaranja.

— Si — Respondió como firmeza, sin titubear.

— ¿Por qué lo hiciste Mingyu? A caso querías volverme alejar de él ¿Es eso?

Él alto negó, miro sus pies y comenzó a jugar con ellos.

— Quería verlos juntos y por lo que vi, nuestro plan funciono — Sonrió, mirando el hermoso azul del cielo.

— ¿Nuestro? — Dijo desconcertado.

— Una persona me enseño a no buscar sentimientos dónde no los hay — Miró a Jihoon, y acarició una de sus mejillas.

— Mingyu ... yo.

— ¡Shuu! No pidas disculpas, por que soy yo él que debe pedirte que me perdones — Suspiró — No debía ir a tú casa y tratarte de esa forma. Te lastime y eso es algo qué aún no me perdono.

Jihoon escuchaba atento, sintiéndose algo incómodo pero tenía curiosidad, curiosidad por saber sobre esa persona.

— Confundí sentimientos de amistad con amor, fui un egoísta, solo pensé en mi y en qué lo qué sentía por ti era verdad.

— Siempre fuimos buenos amigos

— Desde pequeños. Pero ahora se lo que es estar enamorado de verdad, ahora te entiendo. Tú mal humor se va, solo puedes pensar en esa persona tratar de conquistarla y sobre todo darle tú amor.

Jihoon no pudo evitar dejar salir una risita, al escuchar lo cierto que era todo lo que Mingyu decía.

— Wonwoo, él me beso para darme una lección — Él pelinegro abrió los ojos en grande, sorprendido  — Pasamos unos días juntos, tratando de crear un plan para qué tú y SeungCheol volvieran.

— Así que Wonwoo — Sus labios formaron una sonrisa de lado.

— Cuando Chanyeol llegó, se nos ocurrió que si él convencía a su padre para que te obligara a salir con él, tu aceptarías.

— Él director es un ñoño — frunció él ceño.

— Woonwo le dijo a SeungCheol que tu cumpleaños era pronto, Chanyeol acepto llevarte a dónde yo le indique. Y él resto lo dejamos a la suerte.

— Gracias.

— Hice lo correcto, ahora me gusta alguien, y lo siento aquí — Tocó su pecho, justo dónde se encuentra él corazón.

— ¿Es Wonwoo?

— Creó qué es muy notable — señalo su propio rostro — Esperó qué seas muy feliz

— Tu también debes ser feliz.

(^.^)

Jihoon se removió en la cama, despertando un poco tarde.

Era su cumpleaños y gracias a que sus padres lo tomaban como un día feriado, no asistiría a la escuela.

Una pequeña cena se haría para celebrar su décimo noveno cumpleaños, sólo sus amigos estaban invitados.

No era un fan por las fiestas, le parecían algo aburridas, y muy provocadoras de basura.

Le desagradaba la idea de ver a las personas, dejando los vasos o platos desechables por todo el lugar.

Así que por esa razón obligaba a su padres a utilizar platos normales, no le importaba pasar horas lavando cada uno, con tal de no provocar más basura.

Ya que tendría tiempo libre iría a la veterinaria, debía cerciorarse que las mascotas se estuviesen dando en adopción a buenas personas.

De paso pasaba por la escuela de SeungCheol durante la salida, moría por verlo y darle un beso.

Se había convertido en una persona más dócil, amable y aunque le costara decirlo también se convirtió en alguien amoroso.

Pero ese lado tierno y vulnerable sólo lo mostraba con SeungCheol, por que seguía siendo el mismo chico que insultaba a todas esas personas que se atrevían a dejar su basura en los lugares incorrectos.

Cheol🖤

Hola hermoso, buenos días. La verdad es qué, quería felicitarte en persona pero las ganas me carcomen 7u7. Feliz cumpleaños 🎉🎈 nos vemos por la tarde.
Te amo

Pd. Felicita a mí suegra por traer al mundo semejante hermosura.

Jihoon posó una sonrisa en su rostro, con sólo leer él buenos días su corazón se aceleró.

Abrazo su teléfono, y comenzó a rodar en la cama sin percatarse que estaba a final de esta.

— ¡Puta madre! — Grito, tapando su boca con ojos abiertos. Arrepentido por ser grosero tan temprano.

— ¿Que dijiste? — Preguntó su madre, azotando la puerta, caminando lentamente, con una mirada furiosa.

— Nada mamá, se me escapo — De un brinco se levanto del suelo, dejando caer su teléfono.

— Se me escapo — Remedo, la señora Lee — De seguro yo le anduve abriendo las piernas a cualquiera.

— ¡Mamá! — Se quejo, frunciendo él ceño.

— Entonces deja de decir esas cosas y ya quítate ese suéter, llevas dos días utilizando ropa de frio y estamos en plena primavera — Regaño, saliendo de su habitación. Mirándolo con ojos entornados hasta cerrar la puerta.

(。・ω・。)


— Cuida de ellos — Jihoon, movía sus manos despidiéndose de los dos perritos que aún quedaban por buscarle un dueño.

Caminaba por la sombra que los árboles en la calle le brindaban, respirando el aire fresco, un poco acalorado por la ropa que portaba, pero debía utilizar por que las marcas seguían en su piel.

Se dirigía a la escuela de SeungCheol, le daría una sorpresa por que él mencionado no sabía sobre su visita.

Se recargo de la gran barda de la institución, observando a muchos alumnos saliendo.

Sus orejas se tornaron rojas del coraje al verlos tirando basura en la calle y en las jardineras, respiro profundamente, se jalo él cuello del suéter y giro levemente su rostro.

Sonriendo al ver a su novio junto a sus amigos, mostrando sus encías al sonreír.

Dio un paso para acercarse al notar que su novio no lo había visto, pero se detuvo al ver a una chica pararse justo enfrente de él deteniéndolo.

— Nos vemos Cheol — Dijeron Wonwoo y Vernon, alejándose del peligris. Distrayéndose con su amigo Yugyeom por unos momentos.
Observando de reojo lo que pasaba con su amigo y esa chica.

Jihoon sintió ganas de golpear a esa chica cuando se colgó del brazo de su novio, pero su corazón fue golpeado primero al ver como besaba a SeungCheol.

Vernon noto su presencia, pero ya era demasiado tarde. Jihoon ya había salido corriendo de ahí.

— Estas perdido SeungCheol.

My World, Your World (Jicheol)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora