monedas de chocolate | taekook

❁Capítulo 10❁

Sus dedos estaban fríos pero seguían los cariños al no escuchar reclamos del menor, se sentía muy a gusto.

Tocó el borde de la sudadera esperando la reacción del contrario, pudo ver que no había una objeción así que escabulló su mano por la espalda baja haciendo suaves toques en forma circular por la suave y pálida piel.

El menor miró detenidamente al chico de cabello azul azabache sintiéndose completamente rendido y enamorado.

—¿Mhm?—el mayor miro al rubio curioso—. ¿Qué haces mocoso sucio?—le preguntó al sentir los labios suaves de JiMin en su cuello.

Las mejillas de JiMin comenzaron a tomar un fuerte color rojo, ¿Cómo lo decía sin tenerle doble sentido?.

—YoonGi, sólo hacía cariño.

Un puchero salió de los labios del menor, mientras que YoonGi se abstraía para no reír.

—Estoy seguro que quieres besar más allá-hizo un cariño en las mejillas rosadas para luego apretarlas.

—¡Hyung!

Ante la queja del menor sólo le quedó tirar del delgado cuerpo para subirlo un poco más hasta que este estuvo sentado sobre su pelvis. Tomó con sus dedos fríos las mejillas del menor, con algo de fuerza lo acercó hasta sentir sus labios unidos en un toque suave y torpe frente al improvisto.

Las manitos de JiMin se fueron al respaldo del sillón, entre la cabeza de YoonGi, evitando la fuerza que podía ejercer en el beso.

Los labios de JiMin eran tan suaves como algodón de azúcar, sus mejillas se sentían como pompones de lana suave y sus cabellos rubios con toques rosado claro le daban el toque tierno que a YoonGi le encantaba, realmente le encantaba besar esos dulces lábios de algodón.

—YoonGi...—un murmuro se le escapó al sentir los labios de su novio en su cuello—. Esta mierda debería ser ilegal.

YoonGi comenzó a reír, claro que debería ser ilegal.

En un momento un sonido tierno proveniente del celular de JiMin los hizo tomar distancia.

El rubio con el corazón en la mano -debido a la pérdida de aire por el beso- decidió contestar la llamada que mostraba algo de importancia.

—TaeHyung—respondió inmediatamente después de deslizar su dedo por la pantalla.

—JungKook está resfriado y anda por la ciudad en busca de un conejo de peluche que lo enamoró ayer, tú fuiste a esa tienda con YoonGi Hyung. Recuerda dónde queda, Kookie está sólo fuera de casa, con frío ya que quizás comience a llover—Hablaba tan rápido, era una desesperación real, al parecer.

—Oh, esta frente a la plaza justo al lado de una tienda donde venden té con diferentes esencias—estiró su brazo para acariciar el labio inferior de YoonGi—. ¿Necesitas más ayuda Hyunggie?

—No, dile a YoonGi que es un malo por no dejarte venir a la noche de películas.

Antes de responder escuchó el sonido constante que indicaba el fin de la llamada.

—Ese TaeHyung...

JiMin sonrió para bajar su cuerpo, pegarlo al cuerpo de su novio y comenzar otra ronda de besos junto con mimos tiernos que daba el mayor en su cintura descubierta.

❁

El frío poco a poco llegaba, TaeHyung iba por la calle apretando el paraguas volviendo sus nudillos a blancos.

¿¡Por qué JungKook tenía que ser así!?

Entró a la tienda haciendo una pequeña inclinación con la cabeza en dirección a la señora que estaba al lado derecho de la entrada.