Adolescentes... con mala suerte.

Adrien... el mejor amigo.

En la escuela.

Alya miraba a Adrien y a Nino confundida.

-Chicos, soy curiosa y todo así que voy a preguntar ¿por qué traen bolsas de papel cubriendo sus horrendos rostros de adolescentes?

El rubio se cruzó de brazos.

-Me di cuenta de que el mundo no está listo para tanta belleza así que desde hoy no verán mí rostro.

Finalizó y la morena miró a su novio el cual miraba a otro lado.

-No... no se si decirlo por que tú ya no querrías ser mí novia y Adrien ya no querrías ser mí amiguis.

Los dos intercambiaron miradas y el ojiverde apoyo una mano sobre el hombro de su amigo.

-No tienes de que preocuparte Nino, yo seré tú amigo en las buenas y las malas, la riqueza y la pobreza, la salud y la enfermedad, hasta que la muerte nos separé.

Adrien se puso de pie ganando la atención de todos (aún más) y puso una mano sobre su pecho.

-¡Es más! ¡Delante de todo el salón de clases dejaré en claro que Adrien Anastasia Agreste...

Más de uno se aguantó la risa al oír el segundo nombre del chico mientras él seguía con su discurso.

-Jamas! Y repitió ¡Jamás, abandonará a un amigo!

Miró al moreno y todos sintieron algo de miedo al ver a dos tipos con bolsas en el rostro mirándose.

-Sobre todo a ti, Nino Federico Goku Lahiffe, mí amigo, no, mi mejor amigo y casi hermano.

Finalizó mientras Iván se limpiaba una lágrima por la conmoción.

-Tienes razón hermano.

El moreno se puso de pie y se sacó la bolsa.

-¡Que todos vean que me salió un grano!

El rubio se alejó y sacudió las manos.

-¡Asco, asco, asco! Toque a alguien con un grano.
¿Sabes qué Lahiffe? Debemos conocer a otra gente.

Se sentó de brazos cruzados y Nino se tocó el pecho dolido mientras su novia se acercaba a él y lo miraba fijamente.

-¿Nino?

El chico la miró avergonzado por la cercanía.

-Éso no es un grano, es una mancha de membrillo.

Paso su dedo en el rostro de él y Nino abrió la boca sorprendido al entender todo.

-Cierto, olvidé lavarme la cara.

Todos lo miraron con asco.

-No se hagan las divas, hace frío y seguro más de uno no se lavó el rostro.
Te veo a ti Juleka que tienes tu almohada.

Marinette llegó al salón de clases media dormía.

-Hooola.

De tanto sueño que tenía se equivocó de asintió y se sentó sobre el regazo de Adrien el cual se sobresalto.

"¡Calma Adrien júnior, calma Adrien júnior!"

Alya miró a su amiga y la ayudo a llegar a su asiento (no sin antes tomar una foto) mientras Adrien la maldecia internamente.

-¿Otra vez toda la noche con Luka?

Como si en el exorcista se tratase, Adrien giró su cabeza para ver a su amiga.

-¿Luka?

La azabache asintió aún adormilada.

-Ayer ayude a Luka y a Juleka a pasarse el nivel de un videojuego.

Marinette abrió un poco sus ojos y arqueo una ceja.

-¿Por qué tienes una bolsa puesta?

El chico gruño y se sacó la bolsa.

-¡¿Contentos?! Admiren mí belleza.

Los tres amigos intercambiaron miradas y Alya fue la valiente para hablar con tacto.

-Tienes un tremendo granote en medio de la frente.
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Con Nathaniel.

El chico estaba acostado y con un paño sobre su cabeza mientras hablaba por celular con Marinette o más bien con el buzón de voz.

-¡Cof, cof! Hola Marinette. Llamaba para decirte que estoy enfermo y no podré ir a la escuela y por si hoy querías ir al cine conmigo, me disculpó pero no podré.
¡Cooooofrfrfroooof!
Bueno, éso era todo y no te preocupes en venir a cuidarme.

Cortó la llamada y se durmió con una enorme sonrisa.

Seguro Marinette iba a estar todo el día preocupada por él.

Continuará...
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¡Hola!

Yo soy igual de sensible que Alya al decir las cosas ¿alguien más?

Espero que les haya gustado el capítulo y el siguiente... Alya hará de las suya.

Gracias por su tiempo.

Volveré...