Royals. (Harry Styles)

1.

Se confirma el matrimonio entre la duquesa de York y el Principe Harry de Gales, después de un año juntos, por fin ha tomado la decisión de sellar el amor que le tiene para llevarla al altar...

Mi mente se queda en blanco ante semejante notícia, siento la necesidad de llorar incluso golpear aquel estúpido televisor, pero al final sólo dejo caer mi cuerpo contra la fina pared de vidrio, miro mis manos y esa sensación de soledad cruza por mi pecho. Maldito sea el Príncipe de Gales, maldito sea Harry y su estúpida belleza, digo en voz baja mientras escucho las declaraciones de la "feliz" pareja, apago el televisor para hundir mi rostro entre las piernas tratando de aguantar la respiración y olvidar el dolor.

¿Olivia? -escucho la lejana pero ya conocida voz de mi hermano mayor, siento sus brazos rodeando mi frágil y tembloroso cuerpo.- no debías ver eso, demonios

¿p-por qué no? -digo con la voz temblorosa mirando el frío mármol del piso.- me iba a dar cuenta, Thomas

-niega con suavidad quitando algunos de mis  mechones ligeramente castaños, los cuales tapaban mi rostro.- ¿por qué simplemente no dices la verdad sobre tú y él? Sobre aquel momento que tuvieron juntos, quizá resuelva algo, yo se que todavía lo amas.

-un suspiro cansado sale de mi boca, alzó la mirada con una mueca acariciando sus suaves manos que estaban alrededor de mi.- cuando la corona esta un puesto más arriba de ti, no puedes hacer nada -explicó con suavidad encogiendo los hombros, absorvo mi nariz y una risa llena de nostálgia se refleja en mi rostro.- ni menos cuando la reina no te quiere con su nieto... no quiero ser otra Diana ¿sabes?

Tú no vas hacer otra Diana, eres Olivia, Olivia Brown, la chica que está locamente enamorada de él además es un mortal, como tú y yo, demonios -dice con un tono enojado, niego rápidamente para levantarme y caminar hasta la cocina.- si hablaras todo sería diferente, quizá el todavía te ama y...

¡Y nada, por dios! -suelto un grito al escuchar todo lo que era estúpidamente cierto.- no hay más Olivia y Harry, no hay más royal en mi, solo mírame -me señalo con una mano sin soltar la doblada botella de agua.- no tengo nada que podría favorecer a ese estúpido reino o a esa estúpida monarquía.

¿Y porqué lo dejas ir tan fácil? ¿porqué dejas perder a la única persona que te ha hecho feliz en los últimos años? -pregunta serio, demandante casi como mi padre o mi madre cuando nos regañaba.- lo amas Olivia, no lo dejes ir

Se retira de la habitación con un portazo para dejar silencio lleno de tortura, soledad y tristeza, muerdo las pocas uñas que quedaban en mis dedos para beber lo último que le quedaba a la botella, caminó hasta mi habitación, algo vintage pero llena de recuerdos los cuales me hacen sonreír.-

•❅──────✧✧ Harry ✦✧──────❅•

¿por qué lo hiciste? -pregunta Gemma con la cara llena de decepción y tristeza que la reinaba desde la muerte de nuestra madre.- me has dicho en la mañana que Olivia es tu musa.

Encojo los hombros bastante indiferente pero el dolor seguía ahí, golpeando en lo más profundo del corazón pero sobre todo de mi mente, me quito el saco verde olivo para lanzarlo a la enorme cama de mi alcoba y mirar el jardín del patio norte.

Harry -toca mi hombro llamando mi atención, sus ojos verdes conectan con los míos y suelto un suspiro en voz baja regresando a tierra.- no amas a Caroline, no hagas de tu vida una mentira, no sigas el camino de nuestra madre

Mis labios se presionan haciendo un fina línea al recordar la injustica sobre el caso de mi madre pero sobre todo la gran mentira de la jodida monarquía en donde me había quedado atrapado desde aquel día.- ella ya no me quería, no quería esto, y yo no la iba a forzar, la deje libre y eso es lo que seguiré haciendo, no puedo obligarla amar lo que no le hace feliz

¿sin importar tu amor hacía ella? -pregunta al momento que acariciaba los pequeños rizos que se formaban en mi cabello, niego con suavidad mirando mis manos y después comenzando a desabrochar las mancuernillas de mi camisa.-

quiero que sea feliz y si es sin mi eso está bien -digo pensativo al notar el botón que abrochaba mi camisa, era uno de los de Oliva que me había obsequiado cuando hicimos el amor por primera vez.- sin importar lo infeliz que sea, debo ser fuerte por ambos

Le regalo una sonrisa a Gemma pero sale enojada de mi habitación, me quedo mirando aquel paisaje con el frío atardecer de Londres, recordando los últimos momentos con Oliv, los últimos segundo que vi su rostro hasta las últimas lágrimas que derramo por mi culpa,  todo su sufrimiento había sido por mi.

Tantos planes rodaban la mente del rizado, haciendo una confusión pero quizá una estrategia ágil y sencilla.

Su hermana menor baja corriendo por los enormes pasillos del Buckingham, llega a la parte en donde estaban haciendo la dolorosa reunión con las personas más importantes de Londres para celebrar el compromiso, se acerca con una sonrisa a la planeadora y suspira en voz baja.

Disculpa -digo mostrando aquellos hoyuelos que a la mayoría de las personas le gustaban.- necesito añadir a la lista de invitados a Thomas y Olivia Brown, viven en Cheshire -anota con rápidez y asiente con una linda y tímida sonrisa prometiendo que la invitación llegará a más tardar en la tarde de mañana.- muchas gracias, hasta pronto -hago aquella reverencia alejandome a toda prisa, la emoción sale de la garganta de la castaña, le iba a dar una sorpresa a su querido hermano, una que nunca olvidaría.