No quiero que me gustes. [JONGTAE]

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Capítulo 2.

POV. Taemin

-¡Hey, Tae! ¡Taeminnie! ¡Taemin! ¡Tae por favor, despierta! ¡Minnie! –sentí como me sacudían de un lado a otro, abrí mis ojos sintiendo como todo me pesaba y pude escuchar a Kibum respirando aliviadamente.

-¿Mhh? ¿Qué pasa? –me estiré un poco y él me miró con atención.

-Dios Taemin, desde hace rato me encontraba llamándote y moviendo tu cuerpo, pero no respondías.

-Oh dios. –intenté levantarme, pero mi cuerpo volvió a caer en la almohada.

-¿Te has acostado muy tarde ayer? ¿A qué hora llegaste? –suspiré y él me miro de arriba abajo. -¿Has dormido siquiera acá? ¿O llegaste hace unas horas? Has dormido con la misma ropa...

-Prefiero no hablar de eso. –intenté con más fuerzas levantarme de la cama y finalmente pude hacerlo.

-¿Ha pasado algo? Dios, Taemin, te conozco.

-Tomaré una ducha. –desvié el tema.

-¡SI ESE HIJO DE PUTA TE HIZO ALGO JURO QUE LO PAGARÁ! –gritó y yo hice caso omiso, entrando al baño.

Dejé correr el agua y de a poco me saqué la ropa, al terminar de hacerlo entré a la ducha y dejé que mi cuerpo se llenara del agua tibia que comenzaba a despabilarme un poco. Suspiré y comencé a enjabonarme, poniéndome el shampoo para luego ponerme acondicionador.

Sentía como si en realidad no estuviera haciendo nada de lo que recién mencioné, no tenía la mente puesta en lo que hacía, era como si lo hiciera porque si y ya. No tenía ganas de nada, absolutamente de nada después de todo lo que mis ojos vieron en la madrugada.

Al salir de bañarme me cambié para ponerme mucho más presentable, delineé solo un poco mis ojos y salí del baño para encontrarme a Kibum que igual se estaba preparando para la fiesta de esta noche.

-¿Qué hora es? –pregunté.

-Fíjate en tu celular. –demandó y yo me quedé mirando mi celular a mi costado, en la mesita de luz, sin encender aun... Suspiré y me decidí por encenderlo, al hacerlo lo escuché sonar una y otra vez. Cerré mis ojos para volverlos a abrir y me decidí por leer todas mis notificaciones.

Amor:

Hey.

Mi vida.

¿Estás?

Taemin, por dios. Llevo llamándote toda la mañana y tarde, ¿Dónde estás?

8 llamadas perdidas...

¿Estás enojado?

Te juro que se me ha pasado, olvidé totalmente que habíamos quedado en vernos ayer.

Que hermoso tu regalo...

¿Nos veremos hoy?

Taemin, ¿piensas contestar?

Tragué todas las lagrimas que querían salir y cerré su chat para seguir leyendo mis notificaciones.