Posesivo

[15] - Antes de la tormenta

 [15] - Antes de la tormenta

Di un suspiro, dándome cuenta de que estoy fuera de las necesidades para hacer un desayuno adecuado. No hay huevos, pan, leche y, lo que es más importante, bebimos el último vaso de naranja la noche anterior, así que eso también desapareció.

Mi plan para sorprender a alguien con un buen desayuno es un completo desastre pero creo que es mejor que no pueda cocinar para salvar mi vida. Probablemente nos mate a los dos, sin siquiera intentarlo. Tal vez esto fue una señal de que realmente no debo estar cocinando ...

Cualquier cosa.

Nuevamente, por sexta noche consecutiva, no pude encontrar un descanso adecuado. El sueño viene a mí, durante aproximadamente 3 horas por noche, y bien me despertó por una razón desconocida, o un sueño horrible que consistía en la muerte. No solo la muerte de Kieran, sino todos los que me importan o importaban. Sin embargo, sus muertes no fueron tan aterradoras como las de Kieran, pero aún así era algo.

Caminé de regreso al dormitorio, para seguir mirando a Kieran mientras dormía. Esto fue todo lo que hice mientras estaba dormido, solo lo observé, y no de la manera espeluznante que probablemente estabas pensando. Me gustaba ver sus reacciones faciales mientras dormía; a veces tiene la cara arrugada, lo que significa que probablemente estaba teniendo un sueño que no aprobaba. También me gustó la forma en que me apretaba más, lo que siempre me dejaba pensando en qué estaba soñando. Definitivamente fue un abrazador cuando ocurrian esos sueños.

Lo que sea que fuera, nunca me importó demasiado. Me hizo sentir seguro, más seguro que nunca en mi vida. y eso me dijo algo; si me sentí más seguro con un hombre que lastimaba a la gente que con mis propios padres, eso seguramente significa algo, ¿verdad?. Además, mis padres nunca me dieron una razón para sentirse seguro con ellos. En todo caso, fueron la razón por la que tuve miedo en primer lugar.

Lentamente, me arrastró hacia la cama donde Kieran se acostó, asegurándome de no despertarlo. Eran alrededor de las 9:30 de la mañana, no tan temprano, pero considerando que era sábado no teníamos motivos para levantarnos a esta hora. Había planeado quedarse durante todo el día.

Estaba privado del sueño e incluso yo lo sabía, tampoco había pasado desapercibido para Kieran. ¿Qué podría hacer? El sueño no es algo que pudieras solucionar con medicamentos y una botella de tabletas. Bueno si, entonces tal vez podría, pero no iba a drogarme para caer en un sueño profundo. No me degradaría así, no importa cuánto no duerma.

Después de que me mantuve seguro en los brazos a los que me había acostumbrado la última semana, traté de cerrar los ojos para volver a dormir, pero una voz me hizo volver a abrir los ojos.

"¿Por qué te levantaste de la cama?" Preguntó Kieran, bostezando y frotando la somnolencia de sus ojos.

"No pude dormir", murmuré, sacando un bostezo. Escuché que los bostezos eran contagiosos, y si observabas a alguien bostezar, lo harías tú mismo. Supongo que es verdad.

"¿De nuevo?"

"Sí ... supongo que es porque no estoy acostumbrado a dormir aquí todavía, pasará eventualmente", me encogí de hombros.

"Bueno, es mejor que te acostumbres entonces y rápido. Esas ojeras debajo de tus ojos no se notan menos".

"Hm, sí ..." tartamudeé; mi cabeza estaba preocupada con asuntos más importantes además de mis hábitos de sueño. Entonces, recuerdo mi dilema del desayuno. "Nos hemos quedado sin jugo de naranja y muchas otras cosas también", le informé.

"Está bien", dijo, saliendo de debajo de las sábanas, exponiendo nada más que carne en ese increíble cuerpo suyo. "Iré al mercado entonces".

"¿Puedo ir?" Pregunté, con mis ojos pegados a su musculosa espalda mientras la estiraba.