-1- [A]

20 1 5
                                    

Cigarettes.

El chico de cabellos azabache y de nombre Ángel, se encontraba recargado en su ventana, admirando la noche, las brillantes estrellas que adornaban el cielo se le hacían simplemente hermosas, aún así, teniendo aquel bello paisaje frente a sus ojos, no podía evitar sentirse mal.

Eran las 2:00 de la mañana y el seguía sin poder conciliar el sueño, habían pasado semanas desde que había roto con su novio, y después de eso, empezó a probar cosas nuevas, cosas con las que intentaba vagamente olvidarse de su ex pareja, cosas que sabía en algún momento le harían daño, como por ejemplo, comenzar a fumar, verse reflejado en su ventana, lo hacía sentir peor...¿Cómo había terminado así? No lo sabía.

Sus delgados dedos sostenían un cigarro, algo tan pequeño y tan frágil, pero a la vez tan mortal, no lo comprende, ¿Cómo esa mierda llegó a sus manos?.

Pero, están bien, después de todo ya no le importaba el desagradable aroma que provocan los cigarrillos, no podía decir que le agradará, simplemente ya no le importaba.

Estaba cansado, cansado de tener que soportar esa mierda todos los días, tenía sueño, pero el maldito insomnio no lo dejaría dormir, ¿Por qué él tuvo que llegar y hacerle sentir todo eso?

Se sentía tan solo, ya no tenía a nadie a quien abrazar, tal vez a su gato, Wilson, un pequeño gato con manchas naranjas, pero no era lo mismo, el gato podía acompañarlo, y estar allí en sus peores momentos, dormido entre sus piernas dándole una sensación de calidez, pero nunca podría abrazarlo y decirlo "todo estará bien"

Tenía que aceptarlo, su vida cada vez se sentía más aburrida, solo fingía sentirse bien cuando estaba con sus amigos, pero al llegar a casa, tenía que borrar esa sonrisa de su cara y llorar por horas sabiendo que todo es una farsa y que no está bien.

Lo mismo durante todos los días, aún cuando quería llorar, tenía que mantener una falsa sonrisa frente a sus amigos, intentando hacerles creer que es feliz.

Levantarse, ir a la escuela, fingir con sus amigos, volver a casa, dibujar, y quedarse despierto durante toda la noche, era tan agotador.

Ya no podía evitarlo, tomaba un cigarrillo entre sus finos dedos y encenderlo, fumar, fumar mientras pensaba en toda esa mierda de siempre, hasta que el cansancio ganará, terminará durmiendo entre lágrimas que habría derramado al saber que su vida es una mierda.

...ERROR...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora