Coffee.
El chico de cabello azabache, se encontraba dibujando, A su lado había una linda taza color rosa pastel, de porcelana.
El chico tomó la taza con sus dos finas manos, y empezó a bebé aquel líquido agridulce que se encontraba dentrom
Cuánto termino la bebida volvió a servir otra, con la cual hizo lo mismo
Cuando terminó, volvió a servirse otra, con la cual hizo lo mismo, y así estuvo con unas cinco tazas más, hasta que decidio parar, pero no era porque supiera que estaba mal, si no porque ya se había acabado de la cafetera, más fuerte que querer café, era su flojera por hacer las cosas.
La chica se levantó, y se dirigió a tomar la blanca cajetilla de cigarros, más no se percató de que la taza estaba a un lado, y que aún contenía café.
La taza cayó sobre el dibujo, manchandolo de inmediato.
La chica tomo el dibujo que escurría gotas de café, se había tardado 2 dias haciéndolo, estaba tan enojada, empezó a tirar sus lápices y sus cosas para dibujar, para luego ir a su habitación, echarse sobre su cama, y llorar.
Se comportaba como una niña al no conseguir lo que quería, ¿No es así? Pero bueno, creo que algunas personas la entendería si tuvieran que entregar ese dibujo para el día siguiente, y si no lo entregaba le pondrían un cinco en su clase, como ella tenía que hacerlo.
Se levantó, preparo más café, y empezó a dibujar de nuevo, mientras tomaba una y otra vez, más tazas de café.
Segunda adicción: café ✓