cap 8

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Jimin solo abrió los ojos para ver quién era.
Una figura alta y fornida se encontraba pasando por el marco de la habitación con una bata negra y una capucha que impedía ver su rostro, Jimin con miedo solo retrocedió hasta apegar su espalda a la pared, se escuchó una leve risa desde esa capucha, se acercó al chico amarrado y tomo su mentón entre sus manos, Jimin sintió sus manos frías y huesudas

-Park Ji Min- dijo pausadamente por sílabas, se sentía la tención en su voz y su mano que apretaba el mentón

Jimin estaba casi temblando viendo fijamente los labios de la persona tras esa capucha, se quedó unos minutos inmóvil, suponía Jimin que lo estaba viendo u oliendo, pero lo que sea que estuviera haciendo, a Jimin le aterrorizaba.

Aquella persona extraña se alejó de él y dejó de tomar su mentón, se dio vuelta y se quitó la capucha, era un chico, no más de 30 años, soltó una risa psicópata y se dio la vuelta mirando fijamente a los ojos a Jimin, tenia una cicatriz qué traspasaba desde bajo de su ojo, hasta el extremo del labio de la otra parte del rostro, cualquiera que lo viera en la calle, pensaría tan mal como lo estaba pensando Jimin en ese momento, el menor no pudo estar más asustado y aterrado, solo bajo la cabeza y suplico

-Dejame ir... Por favor-

El chico soltó una carcajada sin gracia y se acercó de nuevo a Jimin

-Tal vez te estés preguntando por qué te tengo aquí...y quien soy, y que haré contigo-

Vio muy de cerca a Jimin y sonrió maliciosamente, seguido, llevo sus manos a su mejilla y la acarició, Jimin volteo su rostro y se alejó, el chico mostró indiferencia y tomó su rostro con una mano viéndolo a los ojos llorosos del menor

-el famoso Park Ji Min- el chico sonrió viendo los labios del pobre Jimin aún tirado en el suelo

-un día estaba revisando por internet y adivina de que me doy cuenta- dijo el chico con un tono amable, amable no tenia el más mínimo pelo

-que el chico lindo y famoso de la banda Bangtan Sonyeondan viene a Japón por un tiempo con el maknae de la banda, Jeon Jung Kook-

El chico hablaba con un tono psicópata en la voz, que hacía pensar a Jimin "Jungkook... ¿Donde estas? Te necesito.."

- y adivina...- el chico sonrió ampliamente como si estuviera fascinado, se acercó al oído de Jimin y susurro

-Me encantas- Jimin no contuvo más y una lagrima resbaló por su mejilla, su cuerpo se estremeció por completo y se trató de alejar, pero al ver el más mínimo movimiento de Jimin, el chico lo tomo de la muñeca

-Dejeme ir... Se lo suplico- estaba moviendose como podía sin mirarlo

-Bien...si... Como quieras...- aquel hombre se puso de pie y desató las cadenas que tenía, le quitó la venda de la boca a Jimin, que no se la había puesto bien para que pudiera hablar, lo dejo en pie y estiro los brazos hacia la puerta dando paso a Jimin

El pequeño, confundido, solo se encaminó a la puerta y pidiendo al cielo que no fuera una trampa, bajo las escaleras que estaban a un paso de la habitación en la que estaba, al llegar abajo, se percató de que la puerta principal estaba cerrada bajo llave, Jimin trato de moverla lo más que pudo mientras trataba de no llorar

-dejeme ir...- susurro casi para sus adentros y se tiró al suelo enfrente de la puerta, el chico raro se había quedado en la parte de arriba de las escaleras, y cuando bajo, se acercó a Jimin y le coloco un colllar qcon una cadena, halo el cuello de Jimin y él miró al chico que estaba parado enfrente

-de ahora en adelante, serás mi pequeña zorrita- el chico soltó una carcajada que duró más tiempo y se escuchaba lo más psicópata que Jimin podría imaginar, tan solo pedia ayuda en sus adentros y miraba al suelo,

-ahora..sube a la habitación-

El chico se fue de ahí y se dirigió a un lugar al que cerro la puerta, Jimin asustado, subió las escaleras y se tiró a la cama.

La felicidad no pudo ser más grande al sentir que cuando se tiró a la cama, su celular estaba en el bolsillo trasero del pantalón

Se puso de pie de inmediato y sin que escuchará, marco a Jungkook

Jungkook sentado en la silla del hotel planeando algo para ir donde Jimin, se distraía cada minuto pensando en él, sin embargo, cuando se concentró y puso toda su atención en lo que estaba haciendo, su teléfono sonó, penso en colgar y estuvo a punto de hacerlo, no quería hablar con nadie ni distracciones, pero supuso que era el oficial Lee y al ver el nombre de contacto "bebé <3" no se demoró un milisegundo y su teléfono ya estaba en la oreja y ya había dicho "¿Jimin? ¿Hola?"

Jimin al escucharlo, casi lloro de la felicidad

-Jungkook...- dijo dolido y con la voz cortada

-Jimin... Mi bebé, lindo, ¿Donde estas? ¿Estás bien? ¿Que te han hecho? ¿Donde estas?- estaba tan desesperado que no sabía qué hacer o preguntar

-estoy bien...- Jimin empezó a llorar -no se donde estoy... Me tiene encerrado, es...un chico raro, psicópata...-

-¿No tienes idea?- pregunto apurado, iría donde fuera contar de tenerlo cerca

-No... Nada... Solo hay árboles... Y no se ve nada-

En ese momento, Jimin sentía como unos pasos subían la escalera, Los nervios y el temor hicieron que su corazón casi saliera de su pecho

-Jungkook...tengo que colgar- susurro muy bajito

-No...Jimin, por favor...- Jungkook tenía los ojos muy aguados, quería explotar todo

El chico abrió la puerta y entró azotandola contra la pared, descubrió a Jimin sentado en la cama y con el teléfono en el oído

-¿¡Qué crees que estás haciendo?!-

Gritó tan fuerte que Jungkook lo escucho fuerte y claro, se quedó inmóvil al escucharlo, "Mi pequeño Jimin..." Lo último que pensó antes de que aquel hombre le arrebatará el celular a Jimin y lo tirará por la ventana que había en aquella habitación, una ventana muy pequeña, que tal vez solo un gato podría caver por ahí, Jimin estiro sus brazos para poder atraparlo pero fue inútil "No..." Miro retador al hombre que estaba mirándolo a los ojos fijo

-¿¡Que quieres de mí!?- pregunto alertado y gritando

-habla más despacio, ¿Quieres?- empujó a Jimin a la cama y éste cayó

retrocediendo hasta tocar la pared, cerro sus piernas, sabía sus intenciones, así que ocultó su pecho con sus brazos y trato de encogerse lo más que podía

-por cierto... Me llamo Cheng- el chico sonrió y comenzó a besar el cuello de Jimin

Por otro lado, Jungkook estaba a más no poder de los nervios, no sabía qué hacer y no sabía quien había sido el chico de esa voz, comenzó a caminar de un lado a otro pensando y pensando, creía que el cerebro se le iba a secar o tal vez sufriría una parálisis de éste, estaba empezando a delirar en un momento que estaba enfrente de la ventana mirando a la nada, se dio cuenta de que él tenía la grabadora de llamadas encendida, eso indicaba que tenía la voz de aquel chico que tenis secuestrado a Jimin, en su celular, así que sin esperar un segundo, Jungkook tomó su celular de la mesa y como si se estuviera acabando el mundo, que ciertamente  si se estaba acabando el suyo si Jimin no estaba con el, corrió tan rápido como pudo hacia la estación de policía,estaba un poco lejos, así que se tardó no más de quince minutos corriendo a toda velocidad, llegó agitado y lo primero que hizo fue buscar al oficial Lee, que estaba de espaldas hablando con la recepcionista o eso creía el menor, atrás de su camisa de veía "Oficial Lee" así que corrió donde el y llegando, se posicionó en su frente y comenzó a tomar aire apoyando sus manos en sus rodillas, su corazón palpitaba a mil por segundo.

Después de tomar aire por cinco segundos, el oficial le dio un vaso con agua y lo miro preocupado

-Calmate... Veo que estás cansado, vamos a mi oficina-

Tomó a Jungkook del hombro y lo dirigió a una puerta que se encontraba a no muy lejos, llegaron y Jungkook se sentó en la silla, lo miro y estiro su celular al Oficial, el ya mencionado, se sentó enfrente y comenzó a escuchar aquel audio

-¿You Can Call Me Daddy?       -Yes, Daddy Donde viven las historias. Descúbrelo ahora