-¿Tanto te sorprende verme?- dijo riéndose.
-Eres idiota.- le respondí acercándome para abrazarle.- ¿donde te habías metido? No sabes cuanto te he hechado de menos.- Luke para mi siempre a sido como mi hermano mayor, podía confiar en aun más que en Brooke, Zoey y Emma.
-Me trasladaron de internado varias veces.
-¿Cómo haces para que te expulsen siempre?-Le pregunté soltándome de sus brazos.
-Digamos que con mandar a uno o dos gil... a la enfermería basta- me contestó sonriendo.
-¿En que instituto estás ahora?
-Adivina-dijo con una sonrisa de oreja a oreja.
-Si te pregunté es por que no lo se-contesté molesta.
-Como echaba de menos tu sarcasmo.
-No lo creo- dije jugetonamente.
-Me han trasladado a tu instituto.- justo cuando soltó las últimas palabras lo volví a abrazar con fuerza.
Por fin podríamos volver a estar juntos todos, las chicas, él y yo. Cuándo estábamos en secundaria solíamos escaparnos e irnos a casa de alguno de nosotros. Quedábamos todas las tardes de verano y nos íbamos de campamentos. Pero desde que Luke fue trasladado a un internado ya no era lo mismo, seguíamos quedando las chicas y yo, pero se hacía raro si él.- ¿no vas a decir nada?-sonó sorprendido más que divertido.
-¿Qué quieres que diga? Es lo más reconfortante que he oído desde que te marchaste. No sabes cuanto he odiado ir al instituto desde entonces.-Luke empezó a reírse de mí cuando dije lo último.- ¿Qué te pasa?- le dije intentado sonar molesta, pero no podía para de reírme de Luke también.
-Liss, tú siempre has odiado a la gente, no creo que hayas cambiado mucho en ese aspecto.
-Tienes razón.
-Por cierto, ¿Qué haces bebiendo en un callejón de madrugada? ¿ Y quién es ese tio con el que estabas?
Iba a volverme para presentarle a Luke a Tom, pero él ya se estaba yendo y no iba a correr para detenerle.
-Emmm... podría preguntarte lo mismo, ¿qué hacías en los callejones?
-Iba para mi casa, pero sigo sin entender que haces bebiendo en un callejón.
-Yo tampoco me entiendo, ¿quién m entiende?- dije sonando divertida.
-Yo te entiendo. Y ahora vamos, te llevo a casa.
-¿Cogemos un taxi? Nos pilla lejos para ir andando.
-¿No quieres probar mi nueva moto?-Dijo caminado dándome la espalda.
-Eres un peligro para la sociedad ya de por sí y encima te dan carnet de conducir.- alcancé a Luke, que me levaba ventaja y le di un codazo.- Ey... gracias por esperar eh.
-De nada, y... no soy un peligro para la sociedad.-dijo riéndose.- Toma- me ofreció un casco- eres la primera chica que se monta así que no sé si te quedará bien.
-Con que la primera chica eh... Por cierto, ¿has ligado mucho en el internado?- me encantaba chinchar a Luke, y al parecer a él también le encantaba chincharme.
-Por supuesto, había unos tíos buenísimos con los que tuve un rollo de una noche.- contestó riéndose.
-Eres tonto, Luke.- ahora los dos nos estábamos riendo.
-Agárrate.
-Voy.- dije subiéndome a la moto.
Nadie dijo nada del camino a casa, aunque yo me moría de ganas de preguntarle miles de cosas; cómo era aquel lugar, si había conocido nuevas chicas, si se quedaría para siempre con migo, con nosotras... Al llegar a casa me bajé de la moto y le di el casco. Nos despedimos con un abrazo y se fue. Intenté entrar sin hacer ruido, porque eran las dos de la madrugada y mi madre ya estaría acostada. Y así fue, entré a mi habitación y por más que intentaba dormir me fue imposible. Era imposible dormirse con tantas cosas en la cabeza; Luke, Matthew, las chicas... Se me había olvidado por completo que no les había dicho nada a las chicas cuando me fui...
ESTÁS LEYENDO
《REGRESSSION》
Teen FictionAlison, una chica que se guarda mucho para sí misma, descubre que no todo estaba perdido, gracias al reencuentro con alguien que daba por perdido. Hacia ya unos años que Luke se fue, sin decirle di a donde ni el porque, pero fue cuando volvió, cuand...