A las 12.30 de la mañana tenía lugar la tan esperada pedida de mano de los Príncipes de Asturias.Diez años han pasado desde que Letizia, recién salida de los telediarios de TVE, enseñaba orgullosa su anillo de prometida: una alianza de brillantes de talla baguette en oro blanco, especialmente diseñado para la ocasión.Fueron más de 300 los periodistas acreditados para este acto, en el que no sólo la Princesa lució regalo. Don Felipe fue obsequiado por su prometida con unos gemelos de caballero de zafiro y oro blanco.Un mes después, en diciembre, Letizia acompañaba a su prometido, acudiendo así a su primer acto oficial. Desde entonces, para Letizia ha sido un camino largo y a veces difícil. Poco a poco ha ido ganando seguridad y mostrándose más cálida y cercana, aunque no siempre le ha resultado fácil adaptarse a las normas y el protocolo de esta nueva vida y de la Monarquía, que además vive sus momentos más bajos.