El Reflejo De Mi Alma

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Dejar que las cosas pasen como tengan que pasar, si él/ella quiere hablarme de que lo haga, por el contrario, yo no lo haré.

Cuando nos planteamos esta opción muchas veces no se puede arreglar las cosas simplemente ninguno pone de su parte, y aunque si tenemos ganas de hablarle no lo hacemos y esto provoca que se dañe, o se marchite la relación.

En algunos casos resulta que la otra persona toma la iniciativa y nos acostumbramos tanto a eso que nunca ponemos de nuestra parte para luchar por algo que es de dos.

Debemos ser conscientes que cuando no damos un paso para solucionar cualquier problema corremos el riesgo de que esa relación acabe, y aun más cuando resultamos ser arrogantes o indiferente cuando la otra persona intenta hallar una solución para este problema.

Déjate de miedos, vives solo una vez. Aviéntate, si te gusta, si quieres arreglar las cosas háganlo, cuando no luchas se pierden por no intentar. ¿Y si no es lo que espero? Pasa mucho, pero te levantas, vuelves a sonreír, no es la ultima persona que conocerás, inténtalo, rómpete si es necesario y vuelve a pegar esas piezas. No te quedes en esa cubierta de cristal para que nadie te lastime. Solo te terminaras dañando a ti misma.