El Reflejo De Mi Alma

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"Mi corazón murió aquel día, en el cual vi que la veías como yo te veo a ti"

Me dolió verte con ella, tan sonriente, tan feliz, como yo quise estar contigo.
Siempre anhelé besarte, abrazarte, pero ahora es ella a quien tú le regalas tus caricias.

Fuiste esa persona la cual deseé tener, la cual nunca queremos que se marche.
Eras tu con quien yo quería compartir mi vida. Entregarte mi alma, mis sueños. Pero me equivoque.

Me equivoque cuando creía que aquella sonrisa que dedicabas al verme era para mí, no me daba cuenta de que aquella mirada que lanzabas hacia donde yo estaba no era por mí.

Mi amor por ti era tan ciego, que creía que cada vez que te acercabas hacia donde yo estaba era solo para estar cerca de mí.

Me toco aprender de la peor manera que no todo lo podemos tener.

El día más feliz que tuve contigo, fue aquella vez que me hablaste por primera vez.

Era la persona más feliz del mundo, me había ilusionado con un simple "Hola" pero aquella palabra significaba mucho para mi ¿Sabes por qué? Por qué venia de ti.

Me imaginaba cada noche como me pedirías que fuera tu novia, como se daría nuestro primer beso.
Empezamos hablar, y cada vez que te conocía me enamoraba aún mas de ti.

Cada día le contaba a mi mejor amiga como era hablar contigo, le hablaba a ella de ti como si fueras lo mejor que existiera en esta vida, porque al menos para mí lo eras.

Pero me equivoqué, conté cada una de tus virtudes y sin querer fue ella la que termino robándote tu corazón aquel que yo quería tener.

De tu parte no me dolió. Lo que si me dolió fue que ella "Mi mejor amiga" se robara el más valioso tesoro que había en mi vida, y ese tesoro eras Tú.

Lastimosamente me toco compartir su amor, verlos juntos, besarse.
Si tú me hubieses dicho que te gustaba el, créeme que me alejaría. Para mi primero estaba tu amistad, pero para ti, la mía no valía absolutamente nada.

Ya no guardo rencor en mi corazón.
Pero aquel día el cual los vi juntos quedo tan marcado en mí, que parece difícil borrar, aun lo recuerdo y siento mis ojos llenarse de lágrimas.
Nunca pensé que me traicionarías de esa manera.

Y hoy puedo decir que verte a ti con ella, a la persona la cual quería compartir mi vida, con mi mejor amiga fue el dolor más grande que pude sentir.

Siempre desee que aquellos ojos miel me miraran con ese brillo especial, pero nunca fue así. Y no voy a negar que verte con ella me rompió el corazón.

Pero hoy, esa chica la cual dejaste tirada en el suelo ya no está, ya no esta chica que se la paso meses llorando y esperando tu regreso, y esperando tu perdón, amiga mía. Pero créeme, he vuelto a vivir, a sonreír, porque mi felicidad no depende ni de él, ni de ti.