Capitulo 2.

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Tras sonar el último ¡Riiiiiing! del día, los chicos se encaminaban mecánicamente hacia el aparcamiento del instituto. Como todos los lunes y todos los viernes, Nico subía al mismo autobús que Fran. Los dos amigos asistían a clases de guitarra en una pequeña academia, regentada por una antiguo guitarrista muy amigo de Bruce Springteen, el cantante de Thunder Road, dos días a la semana, pero antes pasaban por la casa de Fran para merender y estudiar un rato antes de entrar a las clases de guitarra. 

- ¿Has podido practicar las escaleras que nos enseñó el otro día? Porque mira que nos mandó trabajo, eh -le pregunta Nico a su amigo mientras caminan por la calle, camino de la academia de música. 

- Un poco, pero se me atascan los dedos cuando voy por el séptimo ejercicio, no hay forma de seguir para adelante con el siguiente ejercicio -reconoce Fran. -Lo mío no son los punteos, como ya os he dicho muchas veces. Prefiero llevar el ritmo y meterle caña a los bajos, porque verdaderamente con eso se hace la melodía de una canción bien edificada.

- Sí, lo comprobé el otro día  cuando casi te cargas el bajo de Jordi-bromea Nico -Parecía que quisieras arrancar las cuerdas a golpes y casi lo consigues eh.

- Estaba especialmente motivado, eran cosas del momento, ya sabes -repone Fran sonriendo -¿Y tú? ¿Has prácticado mucho? Porque al paso que ambos vamos, no conseguimos agradar el día a nuestro profesor de guitarra, eh. 

- Pues la verdad es que sí. Pero más que lo que nos enseñó he estado practicando otras cosas, no sé otros estilos, no sé si me entiendes.

- No entiendo nada de lo que me estás comentando, tío ¿Qué clase de cosas?

- No sé, cosas que se me ocurren, no sé cosas nuevas...Estoy buscando mi estilo personal, es algo de lo que prefiero buscar y tener tiempo -es la misteriosa respuesta del muchacho.

- ¿Y encaja con el nuestro? 

La pregunta de Fran hizo dudar a su amigo. Por unos momentos se piensa la respuesta, sab que su estilo no encaja con el grupo de sus amigos. 

- No del todo. Si te soy sincero, creo que el grupo y yo...mejor dicho, el estilo del grupo y yo no somos compatibles, es que nos falta algo, yo complemento algo al grupo, y vosotros complementais algo en mí, pero últimamente es como si ya nada del grupo me complementara. No se si lo entiendes...

- No lo entiendo, per me lo imaginaba. Pero seguiremos tocando juntos, ¿no? ¿O te vas a independizar? -pregunta Fran, medio en broma, medio en serio.

- De momento no tengo planes de empezar una carrera en solitario, al menos no ahora, hasta que no consiga una base de música, no decidiré nada serio, primero hay que buscar un estilo y después vendrá todo lo demás-responde Nico con fingida seriedad y profesionalidad -pero no sé lo que nos deparará el futuro, a lo mejor dentro de unos años comparto escenario con Bruce Springteen  -añade con una media sonrisa y un leve guiño a su amigo. 

- Por lo pronto una hora con nuestro profesor de guitarra, Armando -dice guiñandole el ojo y golpeandole efusivamente la espalda. 

- ¡Vamo Nico! Mueve esos dedos. El otro día pareciste a Eric Clapton manejando la guitarra y ahoran estás más bajo que el nivel de Fran...-argumenta ironicamente Armando.

- Vaya motivación y comparación que haces...-responde siguiendo con la broma el amigo de Nico.

- Lo siento, Armando es que hoy estoy un poco falto de fuerzas y de concentración -se excusa ironicamente el chico descansando los dedos. 

Armando, Nico y Fran eran los que estaban a esa hora en la academia, el resto abandonaba antes las instalaciones. Nico y Fran habían comenzado desde muy pequeños con las clases de Armando, pero a medida que se estaban probando tecnicamente, habían ido subiendo el nivel hasta quedarse ellos tres solos.

- Venga, Fran, dejate el móvil y ponte ha hacer los punteos....Nico...¿Pasa algo?

- Nada, Armando, que no me salen nada...

- Venga, prueba otra vez...

Nico y Fran lo prueban de nuevo. Esta vez, ambos tienen más fortuna, y pese a algunos errores procedentes de la guitarra de Nico, ambos habían sido capaces de tocar la canción de "Estoy Enfermo" de Pignoise en guitarra. Los dos amigos terminan las clases y se despiden de Armando hasta que viernes. Al salir ambos se separan en uno de los multitudinarios parques que se pueden encontrar en Valencia. Mientras va pensando en lo que le espera para esa tarde, llena de trabajos, y quehaceres de Lengua, Nico, escucha el volumen de una guitarra, para después romper con la suave, y linda voz femenina de una cantante callejera. Escondido detrás de un árbol, ve, como la fuente de la voz, pertenecia a una muchacha, aparentemente de su edad, pelo castaño oscuro, y ojos, aunque no podía distinguirlos bien, eran de un color azulado, el único inconveniente es que esos ojos azules, carecían de un brillo especial. 

Las tardes empezaban a acortarse, aunque todavía no había anochecido del todo, cuando Nico se vio sorprendido por aquella voz y por aquella música, parecía que venia del cielo. Poco a poco, e inseguramente, sus pasos se van acercando hasta donde la cantante callejera emula una canción de Maria Villalon, "La Lluvia" era la canción que la chica entonaba con su guitarra:

Llueve, y las aceras están mojadas
Todas las huellas están borradas
La lluvia guarda nuestro secreto
Llueve y en mi ventana te echo de menos 


Nico parece estar en un sueño. Solo están ella y él. La voz tan suave, angelical, es como si le transportara a otro mundo, a otra dimensión. La calma, la tranquilidad, y el saber que estaba escuchando la voz más bonita de las que había escuchado en su vida, le daban la seguridad de estar viviendo lo más parecido a un sueño. 

 Los días pasan y son ajenos 
El frío me abraza y me parte en dos
La Lluvia cae sobre los tejados 
Dónde fuimos más que amigos
Recuerdo que dormimos al abrigo 
del Amanecer

Nico está inmerso en la letra. Por un momento se ha olvidado de las tareas que tenía que hacer para el día siguiente. Ahora era el tiempo de vivir un sueño. De escuchar como esa adolescente, posiblemente de su misma edad, cantaaba la canción que hacía calmar al muchacho. Que hacía sentir el calor de un sueño. 

Los bares han cerrado 
Ya no hay copas 
La Lluvia hoy mojara mi ropa 
Si no estás aquí 
Si tu no estás me duelen más los años
Las heridas me hacen daño 
Si no vuelvo a oir tu voz

Nico parece estar dentro de la canción. ¿Qué pasará si esa voz, esa tranquilidad y esa calma que está sitiendo, desaparece cuando esa canción y esa voz se terminen? No quiere pensar en eso y seguir con calma como va terminando la canción. Es como estar en un sueño. La magia de vivir la canción dentro de él. La voz y la música cesan de oirse. Y Nico parece haber despertado de un sueño, de un bonito sueño que ha sido interrumpido por el cese de la música.

- ¿Qué estás haciendo? -pregunta una voz, la misma que antes cantaba "La Lluvia" y había hecho un sueño en Nico, ahora se había convertido en una voz bastante venenosa para el oido del muchacho. 

Nico se queda sin habla. Tras la frustración que ha sentido ,se da la vuelta, y camina para volver a su casa. Es entonces cuando alguien le detiene.

- ¡Espera! -se da la vuelta, la misma chica que antes le había hablado con dardos venenosos, estaba cerca de él -Siento haberte dicho esto...Es que...-sus ojos se humedecen

- Tranquila. No pasa nada...Por cierto me llamo Nico -

- Y yo Laura.

Nico se fija en sus ojos. Son unos ojos preciosos, pero le falta algo, algo que se le nota incluso a más de cuatro o cinco metros de ella. Sus ojos no brillan. 


Una Simple AmistadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora