La Maldición De Las Sombras [Pausada]

Malestar

Sus pasos eran lentos, se sentía cansado y un fuerte mareo le impedía moverse con normalidad, Yukio estaba a su lado, vigilando que no se desmayara o cayera en la calle, últimamente sentía que Yukio lo cuidaba más de lo normal, hasta parecía su guardaespaldas personal.

«Siempre te protegeré ¿Quién mejor que tu mejor amigo para eso?»

La voz de Yukio llegó a su mente, pero la imagen era diferente a cualquiera que hubiera tenido en algún momento, además no recordaba que este le dijera algo.

'Maldita sea... Debo estar alucinando' Pensó con desgano, soltó un suspiro cansado y se detuvo cuando todo comenzó a darle vueltas, una fuerte opresión en su pecho provoco que se agachara sosteniendo con fuerza su pecho evitando a toda costa gritar por el dolor.

-¡Chihiro!- Exclamó horrorizado Yukio agachándose a la altura en que Mayuzumi estaba, sosteniéndolo para evitar que cayera al suelo, el miedo comenzó a hacer mella en su cuerpo, respiraba profundamente tratando de tranquilizarse a la par que le sobaba la espalda al de cabellos grises.

-¡Chihiro/ Mayuzumi-san!- Dos voces se escucharon desde la lejanía, los pasos apresurados se hacían más cercanos, Mayuzumi logro ver una cabellera rosada acompañada de una color roja.

Ahí estaba justo frente suyo, Akashi Seijuuro mostraba una preocupación al ver el pálido rostro del mayor.

-Maldita sea Yukio, te dije que no dijeras nada- Poco a poco el dolor se fue yendo, se levantó con ayuda de su amigo quedando frente a su ex capitán.

Sabía que tenia mucho que explicar, tampoco creía que Akashi creyera en aquella loca historia ¿Verdad?

-¿Y por qué no debía decirme? Si al final de cuentas también estoy involucrado Chihiro.

Con eso Mayuzumi estuvo seguro de dos cosa.

Akashi creía en todo eso y además...

Se encontraba muy molesto.

~.~.~.~

En ese mismo momento la película finalizaba, tanto la luz y la sombra salían de la sala para así poder ir de nuevo a la tienda deportiva a la que habían ido, Kuroko tenia un extraño presentimiento, como si algo malo estuviera pasando y de no ser por la vibración de su celular quizás se habría perdido en sus pensamientos.

Momoi-san

¡Tetsu-kun! Tenemos problemas, Mayuzumi-san se puso grave de pronto, creemos que la maldición le esta haciendo algo más de lo que imaginamos, si estas con Kagamin  sera mejor que vengan de inmediato.

Solo le basto leer la primera parte para saber que su presentimiento era acertado, sin previo aviso y ante la mirada desconcertada de Kagami, tomo la mano de su luz y comenzó a llevarlo fuera de aquella plaza.