Todo había sido un sueño, cuando miré la hora me di cuenta de que era muy tarde así que me alisté muy rápido y salí a clases.
En el camino no vi a nadie, las calles estaban vacías exceptuando una constante sombra que veía en callejones o ventanas. La escuela también estaba vacía, independientemente de eso la campana sonó pero en el aula no había nadie, de repente empeze a escuchar susurros, me decían que corriera, ahí lo empezé a entender, si habían personas, solo que estaban ocultas, entonces corrí a casa, algo me seguía, cuando llegué al picaporte vi a mi madre en la ventana, esta gritó aterrorizada, miré atrás y ví. . .