Prólogo

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Baekhyun

Un manto blanco cubría la ciudad. Las luces brillantes en el cielo destellaban y parecían desaparecer por instantes, como ojos parpadeantes. A través de mi ventana, el mundo se veía tranquilo, desierto y hermoso. Aquella silenciosa paz duró apenas unos segundos.

—Baekhyun— una voz familiar llamó. No me giré ni respondí. Creí que había sido mi imaginación hasta que volvió a romper el silencio —. Suelta el cuchillo.

Entonces me giré. Sus ojos, sus hermosos ojos que tanto había deseado ver por última vez, brillaban con desesperación. Sonreí, un gesto apenas visible.

—Viniste— un susurro en el silencio de la noche. No creí que hiciera falta nada más que decir.
Bajé mi mirada hacia el arma punzante que sostenía con mi mano derecha, y lenta pero decididamente deslicé el filo por mi antebrazo izquierdo. Escuché un grito ahogado; provenía de él. Tan sólo había conseguido hacer una minúscula herida en mi piel, y la sangre no apareció.

—Escúchame, Baekkie— ah, hacía tanto tiempo que no me llamaba así —, no lo hagas. Por favor, déjame...
—¿"Ayudarte"? ¿Eso pretendes decir?— detuve lo que estaba haciendo, y alcé mi mirada de nuevo hacia el gigante parado frente a mí.

Silencio. De nuevo inundaba la habitación, y no pude contener una risita.
—Ahora ya es demasiado tarde para eso, ¿no lo crees?— Chanyeol sólo se quedó ahí parado, en la puerta de mi habitación. Al ver que no contestaba, proseguí: — Tuviste mucho tiempo para enmendar tus errores. Y ahora que estoy decidido a acabar con mi vida, ¿vienes esperando que te escuche? Debo parecerte lamentable.

—No, Baek, nada de eso. Por favor, suéltalo. Hablemos, sé que me equivoqué, y vine a...
—¿Qué te hace pensar que me interesa? Todos estos años — lágrimas empezaron a correr por mis mejillas — me hiciste sufrir tanto... No sabes lo mucho que te odio...
—Lo sé, yo...
—Cierra la boca, Chanyeol— automáticamente se calló —. A pesar de todo lo que me hiciste, te amé, y me quedé a tu lado... pero ya no puedo más.

Sollocé y volví a presionar el cuchillo en mi piel, pero esta vez más fuerte. Un hilo de sangre empezó a resbalar por todo mi brazo, alcanzando mi codo y goteando en el piso.
—Detente, Baekhyun, por favor...— Chanyeol dio dos pasos hacia adelante y entonces presioné aún más, profundizando el corte.
—Aléjate. ¿Se te olvidaron las veces que te pedí que pararas?

Palideció y se congeló en su lugar.

—Y-yo lo si-siento mucho, Baek. Por favor no lo hagas... Te amo...
—¡CÁLLATE!— exploté — No mientas, imbécil, cierra la boca... No quiero escucharte más. Se acabó.

Levanté mis manos, sosteniendo el cuchillo con ambas, y lo enterré con fuerza en mi abdomen.
—¡NO! ¡BAEKHYUN!— mis piernas cedieron y lo último que vi fue a Chanyeol avanzar hacia mí.
El dolor me recorrió todo el cuerpo, y ahogué un grito. Aún así, no era nada comparado al dolor que sentía en mi corazón. Todavía sostenía el arma, y la enterré más y más a medida que él se acercaba.
—¡¿Qué estás haciendo?! Baekhyun, basta— su voz tembló mientras me sostenía. Me había caído al suelo, sintiéndome mareado y muy cansado.

Chanyeol sacó el cuchillo, y yo gemí de dolor.
—Suéltame— logré decir —. N-no me to-toques.
—Baek... perdóname... te hice tanto daño... Por favor no me dejes— recargó su frente en la mía, y no pude alejarme a tiempo —. Te amo, Byun Baekhyun. Perdóname...

Cerré los ojos y me dejé llevar por la oscuridad, por el agotamiento.

Chanyeol gritó.

¡Holaaaaa! Menudo prólogo, lo sé. Se viene mucho drama, espero que les guste :)
No olviden votar y dejar un comentario si les gusta. Y por favor, ¡ténganme paciencia! La inspiración me llega de a ratos.
¡Gracias de nuevo por pasarse por aquí!
Bye~ :*

Una última vez (CHANBAEK/BAEKYEOL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora