Por fin te obtengo a ti

396 7 12
                                    

Era un amistad que con el pasar del tiempo se convirtió en un amor cegador de cualquier tipo de cuerpo y alma sin conducto en la vida, estas dos locuras nunca se ha vuelto una, literalmente y tiene alrededor de dos años de relación amorosa siempre se basaba en platicar y platicar. 

-Todo a su momento- Decía Jinx desconsolada y sola en su habitación mientras esperaba la venida de Thresh para reconfortarla como siempre lo hacía. 

Pasaron unos treinta minutos y llegó Thresh con buena cara siempre mostrando su energía positiva ante el mundo a pesar de que no siempre se sentía así. 

-¡Jinx, llegué!, ¿estás por allí?- Dijo Thresh recorriendo su hospedaje y escuchó los sollozos suaves, era raro que proviniera de ella aquel sonido estremecedor, buscó y la encontró en la esquina derecha de su habitación con la cara tapada para que nadie contemplara su rostro cubierto de lágrimas. 

-¿Que te pasó?, ¿quién te hizo daño?, sea quién sea no lo hará por mucho tiempo- Dijo Thresh quitando le las manos de la cara. -No aguanto más esta agonía tu sales y yo me quedo todos los días esperándote sin razón alguna, quiero tener algo distinto Thresh la monotonía me tiene mal- Dijo Jinx con voz ronca por haber llorado hace un tiempo.

-Jinx, escúchame, se que he estado últimamente distanciado de ti, pero, aunque no lo creas es por una buena razón- Thresh le limpió las lágrimas y la logró calmar con un suave beso en sus labios. -Thresh, ¿puedes hacerlo conmigo?- Dijo Jinx cambiando su tono de voz poniéndose un poco tierna pero a la vez deseaba que aceptara para sacar su lado sádico.

-Eso sería un placer Jinx- Thresh después de decir eso no aguanto más y le desgarró la ropa dejándola toda descubierta. -¿Sabes?, he esperado dos años para esto ¡hasta que al fin lo haces!- En eso Jinx espera a que Thresh tome la iniciativa y se convierta en humano. -Así esta mejor- Dijo Jinx al verlo en forma normal. 

Lo beso de manera intensa, bajó haciendo un camino de besos y en ellos daba pequeños mordiscos y lamidas suaves hasta llegar al ombligo. -Si quieres que siga, tu avisas- Le dijo Jinx a Thresh, ya de por si el perdió la razón de lo que hacía debido a la excitación que tenía sólo por un recorrido. 

El asintió y Jinx progresó lo masturba un poco, ella babea apenas lo ve palpitar deja de masturbarle y se lo chupa, comenzó masturbándose y mojándose un poco mientras lo babeaba dentro de su boca se escuchaban los jadeos de Thresh mientras le hundía la cabeza y la perpetraba aún mientras lo tenía en la boca. 

No pasó mucho tiempo y Thresh se vino sin avisar. - D-Disculpa, me deje llevar- Dijo Thresh respirando como si estuviera cansado, Jinx se trago lo que tenía en la boca sin decir nada del sabor y tampoco de lo caliente que estaba. 

-Na, no es para tanto. Ahora te toca a ti, ¿vale?- Jinx se acomoda acostándose en la cama mientras abría sus piernas poco a poco y mostraba lo mojada que estaba desde que comenzó a hacerle oral. 

Thresh no lo dudó ni un segundo y se colocó dentro de ella conociéndola a profundidad mientras Jinx gemía con fuerza, el a pesar de que era inexperto en la materia daba lo mejor de si excitándola con cada movimiento en su lengua y también en sus dedos, Jinx era un poco insaciable así que tardó un poco en venirse completamente ya que quería disfrutarlo con detalle, 

-¡Me voy a venir!- Gimió muy fuerte y se agarró de las sabanas que cubrían su cama mientras sus fluidos empaparon un poco a Thresh. Respiró un poco agitada y el subió para besar de nuevo sus labios, a pesar de que había tomado un poco no le importó en lo absoluto.

Thresh acomodó a Jinx en perrito y comenzó a darle nalgadas por haberlo empapado, cada una era más fuerte y excitante que la otra sus gemidos parecían escucharse desde afuera pero eso a ninguno de los dos les importaba. 

Después de que Jinx tuviera sus nalgas más que rojas Thresh se decidió de una vez a meterla escucha el gemido de dolor de Jinx ya que era su primera vez y fue suave al principio. -No te preocupes por mi, dame fuerte Thresh, no tengas piedad conmigo s-sólo porque sea mi primera vez- 

Thresh no lo pensó dos veces y la metió toda, casi llegando a lo más profundo de Jinx. Esta no dejaba de gemir y le gustaba cada vez más ya que iba muy brusco e intenso, todo giraba en su propio entorno, Thresh agarró su cabello, lo acomodó en sus manos y lo jaló mientras seguía con fuerza. No paso mucho después de eso y Thresh se vino llenándola completa y aquello se derramó y no quisieron detenerse, duraron toda la tarde y parte de la noche en lo mismo. 

Del odio al cariño... esclava sexual YasuoxRivenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora