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Llegué a mi casa y directamente subí a mi habitación, Alejandro todavía se encuentra dormido

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Llegué a mi casa y directamente
subí a mi habitación, Alejandro todavía se encuentra dormido. Por fortuna.

En vez de volverme a dormir o algo parecido, bajé a la cocina y me preparé un desayuno pensando en lo que había pasado con Iván.
Yo solo lo quiero como un buen amigo, como un buen cuñado.
(...)

Ya eran las 8:43 a.m. subí de nuevo a la habitación y Alejandro seguía dormido. Así que lo levanté.

-Hey, Alejandro. Ya levántate, es un poco tarde.
-Ah, Danna. Tengo algo importante que decirte.
-¿Qué pasa?.
-No iremos de luna de miel.
-¿¡Pero que carajo te pasa a ti!?. ¡Primero me dices que si iremos, y después que no!.
-Me gasté el dinero en algunas cosas.
-¿En cuáles cosas?
-Ocupaba pagar unas deudas, y más cosas.
-Mira Alejandro, esta es la última vez en que te vuelvo a creer. Y no quiero luna de miel ni nada, vete al carajo.

Alejandro

No puedo creer que me haya gastado el dinero de nuestra luna de miel. Lo peor de todo es que lo gaste en Tamara. Pero ocupo recuperar ese dinero. En este día, para poder llevarmela en la noche. Si, eso tengo que hacer.
(...)

-Iván, necesito que me prestes algo de dinero.-Le dije algo nervioso.
-¿Cuánto necesitas?.
-Pues, lo suficiente para llevarme a Danna de luna de miel.
-Ten, esta es la última vez que te presto dinero. Espero y se diviertan.
-Hermano, me has salvado. Te lo pagaré todo.-Le respondí muy agradecido.
(...)

-Danna mi amor, mira. Ya tengo el dinero con el que nos podemos ir de luna de miel.
-¿De dónde lo sacaste?
-De un lugar, lo que importa es que podremos irnos de luna de miel. Así que comienza a empacar porque está misma noche nos vamos.
-Si, estaré lista para en la noche. Muchas gracias, por conseguir dinero para poder disfrutar de una pequeña luna de miel.
-Te lo mereces mi vida. Te amo.

Danna

Empecé a empacar, una par de trajes de baño, sandalias, ropa fresca, faldas y uno que otro jeans.
No me sentía ni feliz, pero tampoco triste. Como neutra.
Pues la verdad si me había sentido, ya que Alejandro pues se gastó todo ese dinero en "deudas", pero consiguió y vamos a ir. Pero no me siento agusto con eso de que consiguió dinero.
(...)

Alejandro ya lleva unas cuantas horas manejando.
De repente empiezo a sentir los ojos pesados y me siento muy cansada.
(...)

Alejandro me despertó, ya habíamos llegado.
Llegamos a una playa, es demasiado bonita, y el agua es tan azul, y tan cristalina. Hay un sol, tan brillante y radiante. Que dan ganas de llegar y relajarte en esa playa tan hermosa.

Llegamos directo a una hermosa casa, solo tiene una habitación, sala, comedor, un gran baño, y ventanas y puertas de vidrio, todo se podía ver desde afuera. Obviamente tenía cortinas blancas.
Desempacamos, y fuí directamente al baño a ponerme un traje de baño azul, para que contraste con el agua.
Saliendo de eso, Alejandro ya también estaba cambiado.

-Mi amor, vamos con unos familiares. Para que los conozcas.
-¡Si, claro!
(...)

Manejamos una media hora, hasta llegar a una casa muy bonita, un poco similar a la de nosotros.

Alejandro timbro, y nos abrió una señora.

-¡Alejandro!, ¡Que gusto!, Pasenle.
-Gracias tía.
-Alejandro, siempre es gustó verte primo. ¿Te casaste?-Me pregunta un poco sorprendido.
-Si, me casé. Ella es Danna, vinimos para acá de luna de miel.
-Mucho gusto Danna, soy Leonardo.
-Mucho gusto-Le respondí un poco nerviosa.
-Mi novia también vino de vacaciones, se las presento.
Ella es Tamara.

¿¡Qué!? ¿¡Pero es que este tío está loco!? ¿¡Tamara!?
Solo eso me faltaba, tener aquí a la zorra de "mi amiga"

-Ya nos conocemos Leonardo, Danna es mi amiga de la que tanto te hablo.
-Si, ya nos conocemos.
-Bueno, ¿Por qué no se quedan a comer?
-Si, claro que sí primo. Nos quedamos.-Responde Alejandro muy contento.

Al parecer Alejandro y Leonardo, son muy unidos.
Pues ya que en la comida Leonardo me platicó que criaron juntos y que son como hermanos, primos y mejores amigos.
Siendo sincera, Leonardo es todo un galán. Es simpático, guapo y es hermoso.
Pero es el primo hermano de mi esposo, debo de controlarme.
(...)

-Danna, ¿Me acompañas a darte un tour por la playa?-Me pregunta Leonardo.
-Si, por supuesto.

Juegos Peligrosos|+18|  PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora