El bello y la bestia

I. Hechizo.

Érase una vez, en un tierra muy lejana dos grandes reinos luchaban por el poder sin embargo la guerra era larga y agotadora por lo que el reino que parecía llevar la delantera en la batalla quería concluirla definitivamente, le ordenó a una poderosa hechicera lanzar un terrible maleficio contra su oponente, si esta se oponía su familia sería desterrada del reino, sin opción la hechicera obedeció a los crueles gobernantes de su cálido reino.

Así una noche de invierno, la hechicera disfrazada de una vieja pordiosera, llegó al castillo enemigo y le  ofreció al príncipe un solo girasol a cambio de un refugio contra el frío para probar si realmente este reino merecía su castigo, el príncipe que tenía un corazón blanco y puro, al ver el hermoso girasol que le ofrecían, acepto gustoso a la anciana, la hechicera estaba sorprendida de tales actos pero se percato que cuando el príncipe tocó un pétalo del girasol este cayó al suelo, el príncipe retrocedió asustado, no quería lastimar a tan hermosa flor.

La hechicera al ver el puro corazón del príncipe, se transformó en su forma original,  le digo:

- Príncipe, tú qué eres poseedor de un puro corazón pero no sabes amar, te mereces permanecer aquí hasta que conozcas al verdadero amor más sin embargo aquellos que me mandaron a castigarte son monstruos que no merecen amor, para que está guerra cese  ,tú permanecer en tú reino de nieve hasta que el último pétalo de este girasol caiga o conozcas al verdadero amor y ellos no serán amados por nadie hasta que seas libre.

Y así la hechicera puso un poderoso hechizo en ambos reinos. En el reino de la nieve siempre sería invierno hasta que el príncipe aprendiera a amar y que alguien lo amara a él pero el tiempo paso, el príncipe se volvió frío como su reino y se aislaron de todos, perdiendo la esperanza de que alguien llegará a amarlo pero conservando cuidadosamente el girasol que aquella bella hechicera le había regalado .

En el otro reino, el príncipe que lo tenía todo, no tenía un amor y nadie lo amaría aunque él amara con todo su corazón.