1

4.2K 385 14
                                    

Eran las tres p.m; Cuando una de las noticias más impactantes de América, se dio a la luz.

Claro que para esa hora Harley estaba en la escuela. Aún así, como un virus letal, la noticia se fue extendiendo, hasta llegar a oídos de todos los estudiantes.

De pronto el aire se sentía pesado, en aquel ámbito escolar, mientras que en los pasillos, la gente comenzaba a murmurar.

Murmullo que se extendía a lo largo del edificio. Harley no era un niño tonto, fue cuestión de tiempo en notar las malas miradas, deformadas por algo parecido al miedo.

Las miradas, descaradas, comenzaron a sofocar lo, golpeando un poco su autoestima.

Algo andaba mal.

Lo podía sentir. Mientras el miedo, no estaba seguro de que, crecía en el interior de su pecho.

Comenzó a sentirse un bicho raro, a pesar de estar acostumbrado a las miradas. Estás eran diferentes.

Estás lo juzgaban, por algo que no sabía que había echo.

¿Por qué ocurría esto?, Por qué los maestros lo observaron con pavor. ¿Por qué sentía que estaba en peligro?, Que estaba desprotegido.

Los ruidos en la gran puerta principal llamó la atención de todos, que callaron abruptamente los murmullos.

En la entrada apareció Peter, su hermano mayor, quién se veía demasiado asustado.

Se dirigió a el en medio trote y tomó su mano, mirando a su alrededor como solo un Stark podía hacerlo.

Harley lo supo entonces, estaban siendo atacados. Y siguiendo el protocolo de autodefensa, cambio su semblante también, mostrándose orgulloso, protegiéndose de las miradas ajenas.

Esto pareció ser un insulto para la gente. Mientras comenzaban a voltear sus caras, para susurrar más cosas venenosas.

- tenemos que irnos - informó su hermano.

Harley estuvo apuntó de replicar, pero de la gran puerta se podían ver una multitud, gritando por respuestas.

-¿Que hizo papá?, ¿Creo otro Ultron? - preguntó calmado, mientras seguía los pasos apresurados de Peter.

- está vez fue peor - susurro, para mirarlo a los ojos y decirle que estaba realmente asustado.

Lo cual Harley no comprendía. Su padre Tony creaba desastres que podía detener, no había nada por lo que estar asustado.

Está vez era diferente.

Afuera estaban esperando sus tíos, Bruce y Natasha, quiénes sirvieron como escoltas para ambos Stark.

Los gritos y voces de la multitud, que buscaban ser oídos, se funcionaban entre sí.

Y Harley no podía entenderles.

Una vez dentro del auto más seguro del mundo, Harley buscó respuesta, exigiendo las. Notandose obvio que nadie quería hablar primero.

Cuando su hermano tomó su mano con fuerza, sintió que la cosa no solo estaba mal. Era algo peor y el notable miedo de Peter, quien se aferraba a el, protegiéndolo de algo invisible. Se lo aseguraba.

Volvió a abrir la boca, con la intención de volver al ataque, cuando el auto comenzó a sacudirse.

-¿Que sucede? - preguntó alarmado, mientras su tía preparaba sus armas.

Su padrino Bruce lo tomó entre sus brazos, como si fuera un bebe, dispuesto a protegerlo del mismísimo infierno, cosa que no calmó a Harley.

Asustado, buscó a su hermano, quien para su impacto, le quitaba el seguro al arma que portaba.

- escucha Harley, pase lo que pasé, quédate con el tio Bruce, el te llevará a un lugar seguro - informo su hermano, de tan solo quince años, que pese al miedo, tenía la firmeza de un soldado.

-¿Y que hay de ti? - preguntó aterrado.

Los ruidos que rodeaban el auto eran espantosos, como si la muerte se llevará a muchos hombres, que luchaban fuera.

- confía en mí - trato de calmar su hermano, cuando la puerta del auto fue abierta.

Sin pestañear Peter disparó, sin ninguna compasión, Harley asustado escondió su rostro contra el cuello de Bruce.

No entendía la situación, Natasha salió del vehículo, siendo respaldada por Peter, quien antes de salir le dio un vistazo a su hermanito.

Disparos y más ruidos de muerte, como si se estuviera llevando una lucha devastadora, hasta que esos sonidos fueron opacados por el inconfundible motor del Quinjet.

Bruce abrió la otra puerta de una patada, para luego sacarlo en brazos del vehículo, del otro lado su hermano disparaba a diestra y siniestra.

Junto a él, la tía Natasha hacia usó de sus habilidades de espía.

Harley gritó el nombre de su hermano, mientras Bruce corría con el en brazos. Peter volteo a verlo, quedando desprotegido ante un golpe certero.

El objeto que golpeó a su hermano en el hombro, cortándole un poco. No era mas ni menos que el escudo. El cual volvía a manos de su dueño, tras haber completado su función.

Harley quedó mudó, cuando sus ojos chocaron con los azules de su padre.

El frío inundó su cuerpo, junto a un nuevo y creciente terror. Antes de poder hacer nada, ya había sido subido a bordo del Quinjet.

Contó unos minutos, cuando su hermano apareció disparando, con un solo abrazo, hacia atrás. Mientras se subía a bordo.

La nave comenzó a elevarse y Harley pregunto aterrado por su tía.

Peter lo abrazó con fuerza y le juro que todo estaría bien. El no creía en sus palabras, pero el miedo lo hizo aferrarse al abrazo y con un suspiro cerro sus ojos.

Bruce paso cincuenta minutos monitoreando el Quinjet, buscando posibles malas señales, que le avisará de que fueron seguidos. Por suerte, perecia ser que no.

-¿Y si nos encuentra? - preguntó de la nada Peter.

El castaño volteó, observando su semblante, el cual, pese a ser duro, no lograba ocultar del todo el miedo.

- no lo hará, el no sabe donde vamos - tranquilizó. Peter hizo una mueca. Pero pareció conformarse con eso, pues bajo la vista, centrándose en acariciar los cabellos de su hermano, quien dormia sobre el.

Lazos sanguíneos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora