Say My Name [ ; ♥ ; ] Claysmond

Say My Name.

   Por qué...¿Por qué estaba dejando que esto sucediera? ¿Estaba sucediendo? ¿O todo esto era un sueño en su desordenado cerebro? Si era un sueño, ¿cómo podía sentir la hierba debajo de él? El sonido del agua resonando en la distancia, la sensación de el otro sobre él. Los ojos azules-grisáceos lo miraban con los párpados entornados mientras [él] arrojaba gemidos que Dios sabrá hacia dónde, mientras sus caderas se unían.

   "A-Ah...ngh ..." jadeó, sintiendo las manos pasear bajo su camisa y jugar con sus pezones. Una sonrisa de el otro se cernió sobre su ombligo, la lengua del rubio recorría su torso, probándolo. Desmond se retorció cuando el músculo caliente dejó un rastro húmedo hacia su erección; un gemido escapó de él cuando la cálida lengua abandonó su piel y apareció otra sonrisa.

    "¿Qué pasa, Desmond?" le susurró al oído, tomando su lóbulo entre sus dientes y provocandole de ésta forma. El aliento de Desmond se estaba volviendo rasgado; ni siquiera le importaba dónde estaba en ese momento, su mente era una nube de placer y no tenía tiempo para pensar. Realmente no quería hacerlo.

   "¡P-para de burlarte! A-ah..." fue todo lo que pudo reunir antes de jadear al sentir la mano del otro alrededor de su pene. Su respiración se entrecortó cuando chispas recorrieron por su columna vertebral antes de que dos dedos se metieran en su boca, sobresaltándolo. Por una fracción de segundo pensó en quejumbrarse, pero no lo hizo; en vez de eso, chupó y pasó la lengua por encima de ellos, haciéndolos húmedos antes de ser extraídos. Una risilla lo hizo mirar hacia arriba,

   "Heh... Bueno, estoy seguro de que sabes lo que vendrá después..." dijo el otro, abriendo la sudadera de Desmond y colocándole su camisa negra hasta el cuello. Jugando con un pezón, lo lamió y mordisqueó; saboreando los gemidos que recibió en respuesta. Desmond pasó sus dedos por el cabello rubio, agarrándose a los mechones cuando sintió un dedo húmedo empujar contra su entrada. Él gimió, presionándole ligeramente en contra. Una risita envió escalofríos por su espina dorsal cuando el dedo empujó más allá del anillo de músculo, doblando y frotando contra ese punto dulce dentro de él, que le hizo gritar.

  "¡Mírate Des! Como plastilina en mis manos ... Ahora, si quieres más...tienes que decir mi nombre...¡dilo!" el hombre murmuró en su oído, empujando su dedo dentro y fuera de Miles, haciéndole gemir lascivamente. Agregó otro dedo; tijereándolo y estirando su agujero de par en par. Desmond apenas podía comprender lo que le decía; la sensación de esos dedos moviéndose dentro de él, lo suficiente como para derretir su cerebro. La sensación de un tercer dedo entrando a él lo tenía cerrando los ojos, una incómoda sensación mientras le preparaba. Agarró los hombros del otro hombre sin piedad, dejando marcas debajo de la ropa.

    "A...a-ah..." gimió, obligándose a relajarse alrededor de la intrusión. Cuando el placer eclipsó el dolor, los dedos se fueron; dejándolo gimoteando y sintiéndose en sí, vacío. Se sentó ligeramente, sus ojos dorados buscando al otro; [Clay] se sentó entre las piernas de Desmond, acariciando su propia pene con una sonrisa en su rostro.

    "D...dieciséis ... ¡Apresúrate!" Desmond suplicó, abriéndose más para el otro. Dieciséis sacudió su cabeza, sus ojos volviéndose oscuros,

   "Oh...pero ese no es mi nombre. Si quieres que lo haga -a...ah-, debes decir mi nombre. No el número que me dio Abstergo". dijo, masturbándose un poco más rápido, "Será mejor que te apresures ... o podrías tener que tomar tú el control sobre eso". Dieciséis se rió maniáticamente, antes de que otro gemido resonara desde su boca. Desmond resopló, deseando que su cerebro sumido en placer trabajara; ¿Cual era su nombre? Él se lo sabía...era tan difícil de pensar mientras el otro se acariciaba así, no sabía cuánto tiempo más podría pasar sin que él mismo se lanzara hacia él.