"Solo somos estrellas intentando brillar en este mundo de oscuridad"
La diosa luna ha hablado.
Su decisión ha sido tomada, la tercera de las tres mujeres, la tercera de las tres etapas podrá vencer al maldecido que a sido capás de arruinar la vida d...
A pasado una semana desde mi ultimo encuentro con el séquito de Elliot, no eh podido ir al instituto mi madre no me a dejado pues las heridas que me hicieron no me dejaban levantarme de la cama, aunque ninguna de ellas era grabe.
Toda la semana mi madre intento que le digiera quienes eran los que me habían hecho las heridas pero todos sus intentos fueron inútiles, no se lo iba a decir por mas que rogara, amenazara, o regañara no quería meterla en problemas... No otra vez.
Si hubo una ocasión en donde le había dicho lo que me pasaba y quienes lo hacían, mi madre fue con los padres de ellos con el Alpha y director del instituto uso y hablo con los que según ella le ayudaría a que su hija — o sea yo — dejara de ser golpeada, insultada, y humillada ¿Que fue lo que sucedió?. Nadie le presto atención y como mi madre es demasiado terca y no dejo de insistir la acusaron ante el Alpha de mentir de estar inventando según ellos cosas que perjudiquen a sus hijos, a sus alumnos estrella.
El Alpha Bran — el padre de Elliot y su hermano misterioso — tuvo que tomar cartas en el asunto pues ese tema se estaba haciendo todo un escandalo así que decidió investigar sobre el tema para después tomar una decisión. Claro que durante ese tiempo que fue aproximada tres meses ellos no se acercaron a mi para nada asiendo que mi madre quedara como una mentirosa y fuera mandada a tener su castigo. Por supuesto que no lo permití, no iba a dejar que mi madre sufriera por culpa de ellos, por mi culpa así que hice lo mejor que pude haber hecho:
Tome su lugar.
Veinticinco azotes recibí.
Todos y cada uno de ellos los recibí con la cabeza en alto,— o eso intentaba hacer — y juró que ese día vi a mi madre verme con orgullo puro, nunca entendí porque esa mirada pero no le tome importancia.
Escuchó que tocan la puerta y por el olor a metal noto que es un guerrero de la manada. Recién salida de mis pensamientos bajo para abrir al hombre, mi madre no estaba ella fue a ocupar su puesto de guardia en los limites del territorio hoy era su turno.
Abrí la puerta y el hombre me miro al principio con sorpresa y al final con desagrado como cualquier otro.
— Buenas tardes — dice con cortesía fingida.
—Buenas tardes, ¿Le puedo ayudarle en algo?.
— Eh venido a informarles, que hoy habrá una reunión en la plaza central y es obligatorio que todos asistan. — anuncio el hombre.
— ¿Se sabe de que va la reunión?.
—No señorita.
— De acuerdo gracias por el aviso ahí estaremos. — el hombre asintió y se retiró.
Cerré la puerta y me quede mirando al vacío.
Estoy segura que se tratara del hermano perdido de Elliot. Solo espero y rezo a los Dioses que el hombre no sea igual de cruel que su hermano.
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